Empezamos la noche del pasado domingo en el restaurante Indochina con el 40 aniversario de Li, su propietario, un lugar al que nunca da pereza asistir ni por su gente ni por su carta. Compartimos mesa, mantel y muchas risas con Angel Casas, Ramón Freixa, Miquel Planas, Carme Ruscalleda, Lloll Bertrán... y políticos de diversos bandos y bandas.
El jueves por la noche nos ahogamos en más risas en el Teatre La Neu de Gracia durante el pase privado de «Cantando Desnudos», del americano Robert Schrolk, uno de los logros escénicos en el neoyorkino Broadway. Hace poco más de un año la vio allí Miquel Soler, se hizo con los derechos, la adaptó junto a Jose de la Fuente y Vicens Rioja y listo. Estrenan el próximo martes, y si les apetece una hora de imparable humor no se la pueden perder. Traten de imaginar a ocho hombres-corista sobre el escenario, sin plumas ni marabú, pianista en vivo, ausencia total de indumentaria, alusiones a Jesús Vázquez, Robert Mitchum y Carlos de L'Hospitalet.Imaginen una coral cantándole al miembro más viril con una larga lista de sinónimos que no hubiera soñado ni María Moliner para su diccionario. Un público con el alma en pie es el último acto de una hora sin un ápice de vulgaridad en la que la interpretación deja el desnudo en un segundo plano. De guinda hubo cena en el restaurante del teatro, un espacio delicioso, curiosamente bien iluminado y con carta sin pretensiones y a buen precio.
El mismo día abría puertas un Arsenal bi-sex -hasta ese día sus centros eran «uni»- con todos esos espacios tan buscados para la ITV corporal del auto-casting. Al frente de la instalación, de siete plantas en las que no falta detalle, está una familia ya consolidada en lo del looking for the body, los Carcas. Asistieron Jeannine Gubern, Joana Blanch, Ferrán Rojo, Noemí Gamón y Ana Roura.
En el escenario del MCBA se presentó el martes una muestra de iluminación con líneas de diseño y firmas de autor. Se llama Flos, y se trata de una de las colecciones productoras de sombras más homenajeadas -por lo copiada- y buscadas por arquitectos y afines. Entre los rostros conocidos no podían faltar dos de los más asociados con el diseño industrial en BCN, Fernando Amat, propietario de Vinçon, y Marta Ventós de Arkitectura.
Cierre de semana con una comida en el Passadís d'en Pep -impagable menú porque por años que pasen mantienen calidad y servicio- a cargo de otro centro de estética, Oxigen, el de Estrella Pujol, que sólo por los años que ya lleva en esto de ponernos guapas merece un meritorio plus de continuidad. Judith Mascó estaba allí corroborando con su impecable y eterno aspecto de adolescente recién levantada de la cama, que lo de Pujol funciona.
Me cuentan al cierre el exitazo de dos marcas de casa en las pasarelas de NY, porque de la misma forma que Broadway triunfa en BCN, Custo y Hermenegildo Zegna han arrasado allí con sus colecciones. Una emocionada Sandra Palou, de Zegna, me describía la primera fila de su pase: Daniel Brühl, el actor alemán nominado a los Goya por «Salvador», el jazzista Peter Cincotti, Peter Marino, y el diseñador Neil Barrett. Exitazo para casa, la de todos, en la ciudad forofa de ese horror que se avecina en forma de órgano palpitante, San Valentín.
NUEVA OBRA DE TEATRO-REVISTA. Arriba, en el Teatre Neu de Gracia, a la izquierda el director Máximo Hita, Robert Schrolk, Miquel Soler, Vicens Rioja, y Jose de la Fuente. A la derecha el actor David Llamas, uno de los chicos-corista de una obra en la que la indumentaria brilla por su ausencia.
ANIVERSARIO EN INDOCHINA Y COSMÉTICA SEGURA. A la izquierda Li, propietario de Indochina, en su 40 aniversario. Arriba, Joan Clos, Elena Rakosnik, Artur Mas y Angels Bítria tras la cena.
Debajo, Estrella Pujol con Judith Mascó en el Passadís d'en Pep, una de las apuestas gastronómicas más seguras de BCN.
LUCES Y SOMBRAS EN EL MACBA, Y NUEVO ARSENAL PARA EL BODY
A la izquierda, Mike Zancan, Piero Gandini y Federico Martínez en el MACBA durante la presentación de la nueva colección Flos de iluminación, que contó con la asistencia de un gran número de nombres vinculados al diseño y la arquitectura.
Arriba, Jaime Martínez Bordíu entre Alberto y Cristina Carcas, en la apertura del nuevo centro Arsenal de la Vía Augusta, el primero bi-sex de la marca de gimnasios.