El periodo de alegaciones, que se amplió durante cinco días a petición de Iberdrola, concluyó el viernes pasado, y la CNE deberá tomar una decisión sobre este tema antes del 23 de febrero. El jueves, la segunda eléctrica española pidió en sus alegaciones que el regulador energético aplique la normativa vigente, que limita al 3% los derechos de voto de una sociedad que participe en dos operadores principales del sector energético.

ACS posee el 40,47% de Unión Fenosa y controla la mitad de su consejo, mientras que su participación en Iberdrola alcanza el 12,3%. En sus alegaciones, la compañía presidida por Ignacio Sánchez Galán recuerda los antecedentes de La Caixa y BBVA, y advierte de que una decisión en sentido contrario «crearía inseguridad jurídica». La Caixa tuvo que optar en 2001 entre Gas Natural y Endesa, mientras que el BBVA debió elegir en 2005 entre Iberdrola y Repsol YPF. Tras conocer el planteamiento de Iberdrola, ACS subrayó el viernes que su petición, planteada en noviembre, sigue en pié.

Aunque la eléctrica asegura que sus relaciones con la constructora son «excelentes», no es la primera vez que surgen roces entre ambas.

ACS no vio con agrado que Iberdrola se lanzara a por Scottish Power sin consultarle, una operación que se interpretó como un intento de Sánchez Galán de diluir el peso de la constructora en su accionariado, informa Efe.

Mientras, hoy, el presidente de la Generalitat, José Montilla, recibirá al presidente de Gas Natural, Salvador Gabarró, en el primer encuentro tras la retirada de la OPA lanzada por la gasista sobre la eléctrica Endesa.