PARIS.-
El Tribunal Especial de lo Criminal de París dictó ayer penas de entre 16 años de prisión y tres años sin cumplimiento contra ocho presuntos miembros o colaboradores de ETA. Estas penas son inferiores a las solicitadas por la Fiscalía y que oscilaban entre 25 años de prisión y cinco sin cumplimiento.
La condena más alta, de 16 años de reclusión, recayó en Iñaki Lizundia Alvarez, al que la Corte considera culpable del intento de homicidio voluntario contra uno de los tres gendarmes con los que mantuvo un tiroteo en diciembre de 2001, cuando trataba de eludir su detención.
El tribunal deliberó durante más de siete horas antes de anunciar su veredicto, tras lo cual suspendió la audiencia para posteriormente reabrir la sesión en una vista civil en la que se reclamará una indemnización para los gendarmes.
Durante el juicio, que comenzó el pasado día 1, ninguno de los ocho presuntos miembros de ETA sentados en el banquillo quiso hacer uso de su derecho a la palabra antes de que el tribunal, presidido por Anny Dauvillaire y compuesto por seis jueces, se retirase a deliberar. Uno tras otro, los acusados respondieron con un escueto «no» o «nada que añadir» a la pregunta de la presidenta.
El pasado viernes, la Fiscalía pidió penas de entre 25 años de prisión y cinco exentos de cumplimiento contra los juzgados, entre los que se encuentra Iñaki Lizundia Alvarez, presunto autor de un tiroteo contra gendarmes a finales del 2001 y supuesto jefe entonces de la red Edurne o Pianistas de información de ETA.
|