El alcalde de Alcorcón, Enrique Cascallana, acusó ayer a la presidenta de la Comunidad, Esperanza Aguirre, de someter al municipio a «agresiones partidistas» y de «estar renunciando, de facto» a ejercer de jefa del Gobierno para los ciudadanos de esta localidad.
«Es un hecho sin precedentes en la historia de la democracia que la presidenta no asuma sus responsabilidades de gobierno para con Alcorcón», dijo Cascallana en una rueda de prensa.
Criticó la decisión del Gobierno regional de abrir el sorteo de 414 viviendas del Plan Joven proyectadas en el Parque Oeste de Alcorcón, previsto para el próximo 28 de febrero, no sólo a empadronados en el municipio sino también de otros pueblos de la región inscritos en la lista única de solicitantes de la Oficina de Vivienda regional. Para el regidor, dicha medida es una decisión «claramente discriminatoria» para los jóvenes de Alcorcón.
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