Ericsson, Nokia, Motorola y otros fabricantes ya ofrecen sus redes optimizadas y trabajan en la nueva generación, LTE, que traerá velocidades a través del móvil de 50 megas. Lo dicen los fabricantes y lo confirman operadores como Vodafone y Movistar, que están extendiendo sus redes con tecnología HSPA, para que el usuario no sólo pueda bajar contenidos al móvil desde la red a una velocidad sino también subirlos.

Es el gran reto ahora, permitir al usuario final desempeñar su papel de creador de la Web 2.0, la nueva internet en la que los contenidos del cliente doméstico van a ser vitales. Las operadoras españolas trabajan para elevar la velocidad de subida de contenidos, para que, por ejemplo, desde los móviles Vodafone, que van a ofrecer el servicio de YouTube, sus clientes puedan colgar sus propios vídeos. Dicen los expertos que la banda ancha de verdad en el móvil llegará en dos años. Será la que permitirá a los más de 2.500 millones de usuarios del móvil de todo el mundo migrar hacia demandas más avanzadas, eso sí, si los operadores ofrecen los nuevo servicios a precios asequibles.