Según Pomatta, los resultados que ofreció Mapfre el pasado 7 de febrero reflejan unos beneficios después de impuestos de 610,2 millones de euros, un 33,1% más que en el ejercicio 2005, «cuando realmente fueron de 330 millones de euros, es decir, sólo un 4% más que en el año anterior».

El baile de cifras se produjo porque el balance que presentó Mapfre era pro forma -estado contable con cantidades orientativas con el fin de mostrar una situación financiera futura probable-, pero no reflejaba la cifra real de la aseguradora, que hizo llegar a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y en la que se incluía los negocios integrados en Mapfre S.A. en enero de 2007.

El presidente de la aseguradora apuntó que «hay que informar de otra manera, más veraz, para evitar que los consumidores se confundan, ya que nadie tiene por qué saber qué es un balance pro forma».

A su juicio, «un balance de este tipo es propicio para establecer pronósticos, pero de cara al pasado sirve sólo para contradecir la verdad», por lo que pidió a la CNMV que controle la presentación de estos datos para que «no se engañe» a ningún cliente.

Ante estas declaraciones, Mapfre ratificó los datos que se presentaron en el balance de 2006 al igual que los que ha remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Este organismo comunicó ayer a Efecom que la forma en que la aseguradora presidida por José Manuel Martínez presentó sus cuentas «es correcta y habitual en casos de fusiones o transformaciones societarias», como por ejemplo hizo el Santander tras la compra de Abbey.

El Grupo Mapfre está inmerso en un proceso de conversión en sociedad anónima que culminará previsiblemente este mes cuando estén en circulación las nuevas acciones de Mapfre S. A., procedentes de este proceso y de la ampliación de capital de 3.450 millones de euros incluida en él.

Respecto a los resultados de Mutua Madrileña, la aseguradora obtuvo en 2006 un beneficio neto récord de 607,2 millones de euros, un 26,5% más que en el año anterior y superó en el pasado ejercicio la barrera de los 1.363 millones de euros en ingresos por primas.

Durante el pasado año la compañía realizó inversiones por un valor total de 1.164 millones de euros. De ellas, 642,3 millones correspondieron a su participación en el Banco Santander (33,5 millones de euros), ACS (107,3 millones) y Sacyr-Vallehermoso (501,5 millones). El resto de inversiones se destinaron a la apertura de nuevas delegaciones y a la adquisición de Aresa y AtoClub Repsol, todavía pendiente de la aprobación de la Dirección general de Seguros.