Durante toda la mañana, PSOE y PP estuvieron especulando con la celebración del encuentro e, incluso, con la posibilidad de que se celebrara en secreto y sin que lo conocieran los medios de comunicación.

Sin embargo, las excusas de una y otra índole volvieron finalmente a encubrir la escasa voluntad de ambas partes por reunirse.

Los cuatro integrantes previstos de esta comisión -los socialistas Diego López Garrido y Antonio Hernando, y los populares Eduardo Zaplana e Ignacio Astarloa-, no sólo pospusieron esta reunión preliminar, como mínimo, hasta el próximo jueves por la tarde, sino que podrían volver a retrasarla para la próxima semana.

La versión de fuentes socialistas es que el PP está haciendo todo lo posible para no celebrar ni siquiera la reunión preparatoria del Pacto y que el PSOE no pone condiciones.

Sin embargo, Eduardo Zaplana negó ayer tales intenciones y abonó la tesis de que es EL PSOE el que pone dilaciones al compromiso de Zapatero. El portavoz del Grupo Popular aseguró que su partido quiere el encuentro de la comisión preparatoria, siguió apostando por celebrarlo esta semana y aseguró que no existen «dificultades» para ello. Lo que sí aclaró el dirigente del PP es que su partido no está dispuesto a acudir a la reunión del Pacto si antes no obtiene «garantías» de que existe voluntad de llegar a consensos.

«Si esas garantías no existen nosotros no estaremos muy dispuestos a acudir a un Pacto que simplemente es una mera estrategia, una cortina de humo, o que no tiene la más mínima voluntad de avanzar en un política antiterrorista que se ha demostrado tremendamente eficaz», explicó Zaplana.

Una de las garantías que exige el PP es que en la reunión se vayan a tratar los cinco puntos que reclama para que «se sepa la posición de cada uno». Hay que recordar que esas cuestiones son: ilegalización del PCTV, revocación de la resolución aprobada por el Congreso en mayo de 2005, persecución de las actividades de Batasuna e información al Tribunal Europeo de Derechos Humanos de que sigue siendo una organización ilegal y apertura del juicio oral del caso Egunkaria.

Así, aunque aseguró que Rajoy irá en todo caso a la reunión del Pacto si se le convoca, aclaró que si no se llega a un acuerdo sobre el orden del día del encuentro será «imposible que se pueda celebrar».