Colectivos de montañeros, excursionistas y escaladores han puesto el grito en el cielo por un camino (en la imagen) que la Confederación Hidrográfica del Tajo, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente, ha realizado en en este enclave para llegar a la antigua presa de Manzanares el Real. El fin es limpiar esta presa. Pero alertan de que el daño será irreparable.

Graves daños en rocas y en la vegetación

El pasado fin de semana salí a pasear por el camino que conduce a la antigua presa de abastecimiento de Manzanares el Real, en pleno corazón de La Pedriza, y se me saltaron las lágrimas al ver el destrozo causado por las máquinas excavadoras en este paraje natural. La Confederación Hidrográfica del Tajo, en colaboración con la Comunidad de Madrid, ha iniciado las obras de desmantelamiento de la citada presa, construida hace más de 60 años en las aguas del Río Manzanares, porque al parecer la acumulación de piedras y lodo amenaza su deteriorada estructura. Dichas obras fueron paralizadas porque el camino de acceso a la presa trazado por las máquinas no se correspondía con el autorizado en el proyecto, pero ya han provocado un enorme impacto paisajístico y causado daños en las rocas y en la vegetación de la zona. Los destrozos han desatado las protestas de algunos vecinos, que se manifestaron junto al río para denunciar este atentado ecológico. También han suscitado la reacción desmedida de otros, que han aprovechado el incidente para realizar pintadas contra la especulación urbanística que se está llevando a cabo en la zona, en algunas paredes y viviendas unifamiliares. Dejo claro que no comparto este modo de protesta, aunque si la indignación por lo que constituye un nuevo ataque contra La Pedriza, uno de los espacios naturales madrileños más visitados y que más agresiones sufre, ante la pasividad de las autoridades. Quienes hemos aprendido a disfrutar de la naturaleza caminando por sus sendas, sufrimos al ver las pintadas que ensucian las rocas, la basura y los troncos caídos que se acumulan en algunas zonas, el deterioro de los caminos y puentes y muchas otras cosas más. La Pedriza es patrimonio de todos y hay que protegerla. Cualquier obra, debe realizarse con el mínimo impacto posible y creo que en esta ocasión, no se han valorado las consecuencias de esta actuación y pido que se valore cuando se reinicien. ¿Dónde están los grupos ecologistas que no levantan la voz ante hechos como este?

Juan Castrillo

Hace perder tiempo, pero es lo correcto

No entiendo para qué meten maquinaria en ese sitio... pico, pala y carretilla, como hace 60 años y listo.

C.

Habría sido mejor arreglar la presa

Es una vergüenza lo que ha pasado. ¿No habría sido más práctico arreglar la actual estructura de la presa, que ya está integrada en el entorno, que provocar ese destrozo? Seguro que hay alguna empresa por medio dispuesta a llevarse la pasta.

L.

Más ecologista que nadie

Yo si que soy ecologista porque no piso ni la Casa de Campo. Hay que quedarse en las ciudades y dejar el Campo en paz, ni irse a pasear, ni ir a montar en bici, ni gaitas, dejen a los animalitos tranquilos. Y por supuesto menos aun vivir en el campo, eso es del Neolítico.

N.

Cabreo e incomprensión

Cuando veo nuevas construcciones en las faldas de La Pedriza, aparte de ponerme de mala leche, no entiendo cómo a alguien le puede compensar construir algo en unos terrenos tan empinados y llenos de piedra.

P.

Quejas a la ministra Narbona

Lo curioso es que la obra y los destrozos los hace el Ministerio de Medio Ambiente que dirige la supuesta ecologista Cristina Narbona. Aunque esa presa hay que desmontarla porque está erosionada y llena de lodo la Confederación del Tajo lo podía hacer con más cuidado.

J