Un grupo vinculado a Al Qaeda, los Soldados de Alá, reclamó la autoría del atentado, según una agencia de noticias iraní y el canal de televisión Al Arabiya, con base en Dubai. La oscura organización suní ha sido responsabilizada en el pasado de secuestros y asesinatos en la misma zona.

Los clérigos iraníes se apresuraron a instar a la población -mayoritariamente chií- a no culpar a los suníes del atentado. Irán, donde vive una minoría suní (son el 9% de 70 millones de habitantes), está en guardia de posibles brotes de violencia sectaria.

El gobernador de la provincia de Sistan-Baluchistan, Hasan Ali Nuri, afirmó a la agencia oficial Irna que 11 miembros de la Guardia Revolucionaria resultaron muertos en el atentado y otros 31 fueron heridos por la explosión, acaecida en la ciudad de Zahedan. La localidad está situada en la frontera iraní con Pakistán y Afganistán.

Hasta el cierre de esta edición, las autoridades iraníes habían detenido a cinco personas relacionadas supuestamente con la acción. Además, el gobernador informó que uno de los miembros del grupo responsable del atentado murió durante la operación. La bomba estaba escondida en un coche e hizo explosión a las 6.30 horas, cuando el autobús, que desplazaba una unidad de la Guardia Revolucionaria, pasaba por el lugar. Las imágenes del atentado mostraban el autobús reducido a un esqueleto de hierros, al lado de la carretera.

El coronel Mohamed Javad, que ejerce de portavoz de la Guardia Revolucionaria, acusó a «elementos diabólicos y antirrevolucionarios de llevar a cabo este atentado terrorista», según recoge la agencia Efe. Sin embargo, ni el coronel ni ninguna otra fuente identificó la nacionalidad de los autores de la operación, en una zona considerada muy porosa por la confluencia de las fronteras entre los tres países asiáticos. «Hemos emprendido una vasta operación para determinar la identidad de todos los implicados en este incidente y proceder a su arresto», señaló Javad.

La agencia de noticias Fars afirmó que «un grupo llamado Jundolá [Soldados de Alá], bajo la dirección de Abdolmalek Rigi, rebeldes del este del país, se hizo responsable de este acto terrorista». La zona es muy convulsa: el pasado marzo, un comando de milicianos mató a 22 personas e hirió a otras siete (entre ellas el propio gobernador Hasan Ali Nuri) en un ataque contra un convoy oficial.

Las autoridades iraníes, envueltas en una guerra dialéctica con Occidente, han acusado a Gran Bretaña y a EEUU de apoyar a los rebeldes de la minoría étnica suní que operan en la República Islámica, informa la página web de la cadena británica BBC. La Guardia Revolucionaria es un cuerpo creado en 1979, fecha del triunfo de la Revolución iraní. Se trata de una fuerza militar que, junto al Ejército, es el principal puntal del líder supremo de Irán, cargo que actualmente ocupa el ayatolá Ali Jamenei.