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| No hay verdad que no haya sido perseguida al nacer (Voltaire) |
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| Impresiones |
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| Arco, en su año de transición |
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La Feria de Arte Contemporáneo de Madrid que hoy abre sus puertas ofrece algunas claves para rastrear las tendencias en este terreno. Aunque el certamen español no dicta modas, sí permite augurar por dónde irán las principales compras en 2007. Llama la atención la pujanza de artistas foráneos, ya sea directamente a través de galerías españolas o mediante su participación en galerías de sus países. Además, del medio centenar de nuevos expositores, sólo tres son españoles. Del vigor de Oriente da cuenta el hecho de que, por primera vez, la organización haya invitado a un país de la zona: Corea. Esta patente internacionalización de la oferta permite observar en qué países hay ahora una mayor efervescencia y en cuáles un cierto declive. Entre los primeros se puede citar a Portugal, México, Brasil o Alemania, mientras que Italia sería la cruz. Por otra parte, la selección de artistas -en su mayoría bien conocidos- y los soportes -con predominio de la pintura y la fotografía- indican que estamos en un momento de poco riesgo y atrevimiento, quizás a tono con la edición de transición de la feria. Y es que, para el año que viene, Arco anuncia una revolución sustentada en tres pilares: nuevos pabellones, apuesta por atraer a galerías con poder de crear tendencias y potenciación del coleccionismo privado.
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