A Iker Casillas le hacen gracia muchas cosas; una de ellas es contemplar cómo interpreta parte de su entorno las señales que envía el fútbol y sus circunstancias. Que los periodistas le pidan que comente la crisis del Barcelona ya no le llama especialmente la atención al portero internacional del Real Madrid. Hubo una vez en que sí creía en ciertas verdades, pero ésta es su octava temporada en el primer equipo y prácticamente lo ha visto y escuchado todo.
«Si el Barcelona está en crisis, nosotros estamos en el lado oscuro», ironiza Casillas, que descarta que el incidente protagonizado por Eto'o esta semana en el club azulgrana sea lo suficientemente grave como para marcar un antes y un después. Es más, el portero tampoco descarta que pueda ser así, pero se niega a meter al Barcelona a día de hoy en una batidora imposible de detener. «Tiempo al tiempo», es su augurio más atrevido.
«Samuel es mayorcito, sabe lo que dice y cómo. Lo que ha dicho es porque tendrá sus motivos y cree conveniente sacarlo de esa manera. Le respeto pero no comparto esa idea», manifestó con la naturalidad que caracteriza al guardameta. Naturalmente, se le preguntó por la hipotética posibilidad de que el delantero camerunés regrese algún día al Madrid, su primer club en España. «Yo creo que eso es una utopía, pero en esta vida hay cosas más raras».
Vestuario.
A la vista de que en el Real Madrid hay poco que rascar, se buscó su opinión sobre cualquier cosa que fuera azulgrana. El abrazo que en el entrenamiento del miércoles se dieron Eto'o y Ronaldinho, en una clara interpretación de la paz entre ambos jugadores, también requirió la opinión de Casillas: «A Samuel le conozco como a Ronaldinho; son dos personas entrañables. Además, escuché a Puyol y todo lo que ocurrió me pareció sincero».
Más sobre la crisis del Barcelona: «Decir que Eto'o ha destapado un problema dentro del vestuario me parece que es algo exagerado por parte de la prensa, porque problemas hay en todos los vestuarios. Samuel es un jugador contrastado, de mucho peso a nivel mundial y tendrá sus motivos para decir eso. Hay un problema, lo ha dicho y luego se ha engrandecido. Los problemas los hay en todos los vestuarios, repito, pero a veces se entera la gente y otras no».
Cómo no, el ejemplo de los fustigados galácticos, parte del pasado reciente del Real Madrid, salió a la luz, y no precisamente por culpa de Casillas. ¿Es posible que al Barcelona le ocurra algo parecido? «Si en un mes, empieza a perder partidos de Liga y cae cinco seguidos y no consigue nada será como nos pasó a nosotros. Pero si luego gana la Liga y se mete en final la Copa de Europa, no será igual. El Barcelona ha tenido un problema, pero es un club grande y todo lo que ocurre ahí se engrandece», dice, consciente de que si algo parecido hubiera ocurrido entre, por ejemplo, Van Nistelrooy y Capello, ya habría dado la vuelta al mundo no una, sino tres veces como poco.
Respecto al débil estado del Real Madrid en el Bernabéu, Casillas admite que existe «ansiedad» en el vestuario. «Estamos en una guerra psicológica en el Bernabéu que puede aprovechar el Betis». El conjunto andaluz visita mañana a las 20.00 horas el estadio madridista. «No estamos muy acertados de cara al gol, eso es cierto, pero también es verdad que defendemos muy bien. Ya sé que jugar bien y ganar es lo ideal, pero si no podemos ahora hacer lo primero, al menos que podamos sacar todos los puntos».