'Plataforma'
Autor: Michel Houellebecq. / Traducción y dramatirugia: Calixto Bieito y March Rosich. / Dirección: Calixto Bieito. / Escenografía: Alfons Flores. / Intérpretes: Juan Echanove, Marta Domingo, Lluís Villanueva, Carles Canut, Mingo Ràfols, Boris Ruiz, Belén Fabra./ Escenario: Teatro Romea. / Fecha: 12 de febrero.
Calificación: ****
BARCELONA.-El espectáculo puede herir la sensibilidad del espectador -especialmente de la espectadora- si tenemos en cuenta que durante casi todo la obra contemplamos imágenes de penes erectos que se introducen en distintos agujeros femeninos. Hecha esta aclaración, Plataforma es un magnífico montaje que recrea con gran acierto la exitosa novela de Michel Houllebecq.
La puesta en escena está construida como poema dramático: una magnífica gran plataforma giratoria muestra un enorme piano de cola en un lado, unas cabinas de peep show en el centro, unos butacones en el otro lado. Sus giros nos proporcionan visualidad y dinamismo.
El tema es la sexualidad como única salida a la destrucción de nuestro mundo. Sólo el sexo importa y éste se une al dinero, al capitalismo salvaje, a la frenética soledad de los protagonistas.El núcleo argumental se centra en el desencantado Michel, quien en Tailandia vivirá el turismo sexual hasta encontrar el amor libidinoso de Valérie. Juntos, querrán crear un hotel de lujo donde se proporcione un sexo libre de tabúes, por supuesto mercantilizado.
A partir de aquí, hallaremos una violenta crítica a nuestra sociedad capitalista, una denuncia descarnada y brutal al islamismo, una desesperación absoluta que crece con la muerte del amor en un atentado terrorista. El espectáculo recoge todas las esencias de la novela de Houellebecq, y no deja resquicio para posibles bajadas de tensión.
En el viaje del protagonista a Tailandia hay una pulsión de vida que se transforma en pulsión de muerte. Se mantiene un ambiente de abusos, de sórdida diversión, de amor y desesperación. El ritmo dramático es sencillamente excelente y nos va sumergiendo en la profunda soledad de esos seres que sólo buscan el sexo mercantilizado lejos de Europa, en un país cuya necesidad lo convierte en moneda de cambio.
Juan Echanove da vida a la necesidad, la vulnerabilidad y la autodestrucción en una vigorosa interpretación llena de matices que resulta magnífica. Lluís Villanueva, Mingo Ráfols, Boris Ruiz, y Carles Canut son neuróticos y alegres desamparados que también se refugian en el turismo sexual. Belén Fabra mueve su bello cuerpo desnudo mientras evoluciona en una sigilosa danza o entona alguna melodía. Marta Domingo es el amor hallado a través del sexo, perdido por el terrorismo islámico, gran actriz que marca la desesperada trayectoria del protagonista. Los tabúes sobre el amor y el sexo, la vida y la muerte, se transgreden durante dos horas de espectáculo duro, brillante, espléndido en la dirección y en la interpretación.