La han encontrado en el Encosta do Lago Resort, un espectacular complejo turístico a 15 minutos de Faro, en el Algarve portugués. Tiene todas las condiciones para pasar unos días a cuerpo de rey. Campos de golf, campos de entrenamiento, unas villas donde no falta detalle... Los jugadores, por parejas, ocupan esas pequeñas casitas. Benítez se los ha llevado a todos, excepto a los lesionados, incluidos Arbeloa y Mascherano, los últimos en llegar. El equipo aterrizó el lunes en el aeropuerto de Faro y ayer regresaron a Liverpool, donde disfrutarán hoy de una jornada de descanso.

Durante estos cinco días ha habido tiempo para todo. Lo primero para entrenar, obvio. Como hay tiempo para recuperar, trabajo de fuerza, pero también de recuperación, dependiendo de las necesidades de cada futbolista. El equipo no ha tenido vacaciones de Navidad y esta minipretemporada puede servir en algunos casos para mejorar el estado físico. «Hemos venido buscando, sobre todo, mejor tiempo que el que teníamos en Liverpool. También algo de tranquilidad y concentración, convivencia...», cuenta Víctor Salinas, uno de los fisioterapeutas que ha viajado con ellos.

Esa convivencia se fomenta en los ratos libres. Hay mesas de billar, cartas, las tradicionales Play-station de cada jugador, pero el golf se ha convertido en un divertimento para todos. Unas bolas para relajarse y disfrutar de las horas muertas. El cuerpo técnico también ha pretendido cambiar el chip. Los dos últimos resultados en la Premier -empate contra el Everton y derrota ante el Newcastle- han dejado la Liga muy lejos (a 16 puntos del Manchester). Por eso la Liga de Campeones se ha convertido en un objetivo primordial. Y nada mejor que golf y sol para intentarlo.