Los sectores en los que está fracturada IU han sido incapaces de llegar a un acuerdo sobre las candidaturas al Ayuntamiento y a la Comunidad en los días que han pasado desde la propuesta que aprobó la Permanente Federal de IU y que les instaba a hacerlo. Como en el cuento de nunca acabar, el Consejo Político Regional de ayer convocó este órgano de nuevo para el jueves para volver a negociar las listas.

Sí hubo acuerdo en torno a los cabezas de lista. El diputado nacional y candidato al Ayuntamiento, Angel Pérez, propuso hace tres semanas a la portavoz municipal, Inés Sabanés, encabezar la candidatura regional. Casi 20 días después, Sabanés aceptó, ayer, y Gregorio Gordo (el candidato anteriormente elegido) será su número dos.

Pérez será candidato al Ayuntamiento y su segundo será elegido por las minorías. Pérez se lo ofreció a la abogada Virginia Díaz, que optaba a encabezar candidatura, pero ella rechazó ser segunda, además de rechazar de plano todo el acuerdo de ayer. Los dos grupos que se mueven en torno a Fausto Fernández y a Díaz no fueron capaces de ponerse de acuerdo sobre quién quieren que sea el número dos.

El acuerdo votado ayer en el Consejo Político Regional salió adelante con 117 votos a favor (78%), 27 en contra (18%) y seis abstenciones (4%).

Una parte de IU -la que controla la organización en la capital- rechazó el acuerdo. En una carta firmada por el coordinador de la capital, Daniel Alvarez, y Virginia Díaz, ambos califican la decisión como «un claro retroceso» y dicen que incumple las resoluciones de la Comisión de Garantías y de la Presidencia Federal. «Un cambio de cabeceras», afirman, no soluciona la crisis al mantener en la capital a un candidato «impuesto por las direcciones». Los que han apoyado a Sabanés en el último año se sintieron traicionados por el acuerdo que apoyó la candidata.

De aquí al jueves, todos seguirán negociando la distribución de cada grupo en la lista. Las minorías sólo aceptan una división al 50%.

Las personas que están en torno a Pérez, sin embargo, sólo aceptan que los minoritarios -un 40% del Consejo- tengan dos representantes entre los cinco primeros del Ayuntamiento y cinco entre los 12 primeros de la Comunidad.

Si el jueves no hay acuerdo, el Consejo Político confrontará las diferentes listas, votará y éstas se elaborarán de forma proporcional.

Tras la grave crisis de IU, ayer, todos quisieron ver el lado positivo del acuerdo, que en parte ha venido forzado por la dirección federal.

El coordinador de Madrid, Fernando Marín, dijo que IU está «en una situación magnífica» y se mostró «seguro y convencido» de que serán capaces de acordar la lista.

Marín insistió en que IU «está en campaña porque nunca la hemos abandonado». A pesar de estas afirmaciones, la campaña autonómica ha estado paralizada en las últimas tres semanas, y algo parecido ha ocurrido en la municipal. IU ha desaparecida del debate político público en los últimos días.

Pérez reconoció que el «debate» que ha protagonizado IU es «de difícil entendimiento» y lo achacó a que esta formación tiene «un funcionamiento democrático que llega a la extenuación». Además, resaltó el gesto de Gordo, que renunció a su candidatura, que ganó por amplia mayoría y que nadie cuestionaba, para «abrir la posibilidad del acuerdo».

Sabanés destacó «el sobreesfuerzo propio de IU» que ha costado el acuerdo y dijo que éste es fruto de la «corresponsabilidad».