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| En un Estado totalitario se ocultará a la gente todo lo que pueda crear descontento (Friedrich Hayek) |
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| Impresiones |
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| La mayoría demócrata empieza a complicarle los planes a Bush |
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Todo indica que muy cuesta arriba se le va a hacer a George Bush el tramo final de su mandato. Tras la victoria de los demócratas en las elecciones legislativas del pasado noviembre, la Casa Blanca confiaba en desplegar su capacidad negociadora y lograr que la Cámara de Representantes no supusiera un freno a la actual política exterior y de defensa estadounidense. Ahora, sin embargo, Bush ya sabe que sus rivales sí son un obstáculo en sus planes, y ha comprobado también que ni siquiera cuenta con el respaldo de todos sus correligionarios. Por abrumadora mayoría, 246 congresistas -entre ellos, 17 miembros del partido del presidente- votaron una resolución este viernes que rechazaba el envío de 21.500 soldados adicionales a Irak, recientemente aprobado por la Administración estadounidense. Aunque el efecto de la moción es nulo, por no tener carácter vinculante, sí ha supuesto un duro golpe moral y el primer gran revés político para Bush, advertido por la mayoría demócrata en las dos cámaras del Capitolio de que le exigirán cambios en los planes militares en Irak en marcha, si quiere ver aprobados los próximos presupuestos de Defensa. Esta derrota en el Congreso ha demostrado, además, que los dos grandes partidos ya sólo piensan en clave electoral y no darán un solo paso sin mirar de reojo a las próximas presidenciales. Por ello, cada vez más republicanos demuestran abiertamente que no están dispuestos a jugarse las posibilidades de reelección por hacer seguidismo del presidente en el avispero iraquí, cada día más lejos de solución. Ayer, todos los esfuerzos republicanos se centraron en bloquear un debate similar al del Congreso en el Senado (a los demócratas sólo les faltaron cuatro votos para lograr la toma en consideración). Descolocado se halla Bush ante un escenario con el que él no contaba, que le obliga a librar batalla también en casa.
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