LONDRES. - Lo que se plantea como un método para conseguir óvulos con los que experimentar y obtener tejidos para realizar todo tipo de trasplantes puede desencadenar una fuerte polémica bioética. El Reino Unido se plantea permitir que sus científicos puedan pagar hasta 250 libras -375 euros- a las mujeres por cada óvulo que donen a la investigación, además de los gastos de desplazamiento hasta el centro correspondiente donde se realice la extracción.
Un informe de 64 páginas del Departamento de Fertilidad Humana y Embriología, revelado ayer por el periódico británico The Observer en su primera página, plantea esta posibilidad como uno de los caminos para paliar la carencia de óvulos con los que cuenta la comunidad científica.
Los óvulos se presentan como imprescindibles para las investigaciones con células madre, que se encuentran en un número considerable en los embriones y se pueden utilizar, en su caso, para fabricar toda clase de tejidos humanos con los que realizar trasplantes y atajar enfermedades cerebrales, de la piel, de los huesos...
El anuncio oficial se podría hacer este mismo miércoles. Se trataría de una ruptura de todas las reglas del juego en este campo de la investigación biomédica conocidas hasta ahora. Los pagos a cambio de donaciones de óvulos no están permitidos para experimentos científicos, aunque sí están autorizados para tratamientos de fertilización in vitro o para combatir la estirilidad.
Problemas de salud
La propuesta de este organismo oficial es ésa. El debate, otro. Informes científicos aseguran que la donación de óvulos puede generar serios problemas para la salud. No de forma directa, sino de foma inducida. Es decir, muchas mujeres recurren a la ingesta de drogas para incrementar su producción de óvulos.
Las consecuencias, según científicos de la Universidad italiana de Padua que cita el periódico londinense, pueden ser brutales: parálisis, el fallo de extremidades que terminan siendo amputadas o la muerte.
Pero hay más. Algunos expertos en ética, como la profesora de la Universidad de Londres Donna Dickenson, advierten de cómo para muchas mujeres, 250 libras pueden ser más que suficientes para subsistir y pueden recurrir de forma peligrosa a la donación de óvulos para obtener ese dinero que ofrecen las autoridades.
Es evidente que 250 libras apenas son una ayuda en el Reino Unido, pero se pone el caso de mujeres del este de Europa que pueden acudir al país a vender sus óvulos. «Sin darse cuenta, las autoridades podrían estar abriendo la puerta a la creación de un verdadero mercado de óvulos. Tanto para mujeres del Reino Unido como extranjeras», advierte Dickenson. «Esto convertiría a los óvulos en un mero producto comercial, algo que me parece muy preocupante», continúa esta experta.
Sin embargo, otros investigadores en el campo de la embriología han aplaudido la propuesta de inmediato. El profesor Peter Braude, director del departamento de salud de la mujer en la Universidad King's College, de Londres, declaró a The Observer que los riesgos médicos que implica la extracción de óvulos no deberían ser un impedimento para que las mujeres puedan ofrecer sus óvulos a la ciencia. «Las mujeres son suficientemente inteligentes como para tomar decisiones por sí solas sobre si desean donar óvulos a la investigación», dijo este especialista. «¿Qué razón hay para impedírselo? Ninguna, con tal de que se les informe de los riesgos que existen. Las mujeres llevan 20 años donando sus óvulos en clínicas de reproducción asistida, asi que esto no es nada nuevo», concluyó Braude.
Otro experto que prefirió no dar su nombre aseguró también que no hay ningún motivo para impedir estas donaciones a cambio de dinero, teniendo en cuenta que en estos momentos ya se ofrecen pagos a cambio de participar en ensayos clínicos. En este sentido, por lo tanto, la nueva propuesta no debería escandalizar a nadie. Los óvulos son fundamentales para la investigación en campos como la clonación terapéutica, cuyo objetivo es producir embriones para extraer células madre con los que obtener toda clase de tejidos para trasplantes.
En todas las normas hay límites, y en este caso para donar hay que justificar la razón por la cual se ha tomado la decisión. Ésta, según ese informe oficial del Departamento de Fertilidad Humana y Embriología, no es otra que dejar claro que la donación tiene un fin «altruista».
El ejemplo que se da es claro: una mujer dona un óvulo para que los científicos trabajen en una línea de investigación capaz de resolver el problema que aqueja a un familiar. Altruista, sí, pero a cambio de 250 libras, cantidad que no supera, por cierto, lo que se paga a los donantes de semen o de óvulos (para los casos admitidos y antes relatados).