La fusión de los hielos polares provocaría una subida del mar de entre cuatro y seis metros, según esos estudios. El fenómeno causaría «profundas modificaciones en los actuales límites costeros y la inundación de zonas bajas» y exigiría unos esfuerzos «costosísimos y problemáticos» para cambiar de lugar de residencia a decenas de millones de personas.

La posición oficial hasta la fecha, dada a conocer en el año 2001, era que las posibilidades de que ocurriera un fenómeno de esta naturaleza eran «no bien conocidas, pero probablemente muy escasas».

El proceso de fusión podría durar varios siglos, pero el calentamiento progresivo causado por la falta de eficacia a la hora de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero aceleraría la desaparición de los hielos y daría a las naciones menos tiempo para adaptarse a sus consecuencias.

Islas y ciudades costeras

Zonas como las Maldivas quedarían inundadas y correrían un gravísimo peligro de verse anegados países prácticamente al nivel del mar, como son los Países Bajos y Bangladesh, así como ciudades costeras como Londres, Nueva York y Tokio.

La advertencia de los científicos aparece en un informe del Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC), que evalúa los impactos calentamiento del planeta y que se publicará en abril. En su redacción definitiva, el capítulo en el que se resume el informe para los políticos, al que ha tenido acceso The Guardian, afirma que «el enorme aumento del nivel del mar que se produciría supondría importantes modificaciones del litoral, con efectos aún más sensibles en los deltas de los ríos». El informe destaca que «trasladar a las poblaciones, junto a su actividad económica y las infraestructuras resultaría costosísimo y problemático.

Estos nuevos datos aparecen cuando se ha conocido que se han producido elevación de emisiones de gases de efecto invernadero, que alcanzan centenares de millones de toneladas, de las que las grandes empresas británicas no informan, con lo cual se oculta la dimensión exacta de cómo Reino Unido contribuye al calentamiento.

Según este informe, de la organización Christian Aid, el 84% de las 100 principales empresas británicas que cotizan en bolsa ha ocultado al Gobierno la emisión de 200 millones de toneladas de CO2.