Tras una semana de dudas en torno a la incorrección política que representa la contestación a una sentencia del Alto Tribunal -más aún después de haber reprochado al PNV y al PSOE su movilización, semanas atrás, contra el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco-, los populares optaban ayer por dar un perfil bajo a su «necesario» respaldo al acto.

Ni Mariano Rajoy ni, tal vez, el propio Angel Acebes asistirán a la concentración de la AVT si la dirección del partido acaba por refrendar la opción unánimemente escogida por el presidente del partido y sus asesores -desde Josep Piqué hasta Jaime Mayor Oreja- en la reunión de maitines.

Según las fuentes consultadas, lo que prevaleció ayer fue la «cautela» y la prevención hacia un acto que, pese al respaldo inequívoco a la AVT, podría «descontrolarse» en sus críticas a las instituciones judiciales.

El secretario general del PP, que no informó ayer del apoyo a la convocatoria hasta que fue expresamente preguntado en rueda de prensa, obvió en lo posible la parte del comunicado de la asociación que habla de la «traición de las instituciones» y su «duro golpe» a las víctimas.

Acebes subrayó, en cambio, la fidelidad del PP a su propia posición -más moral que política en este caso- de apoyo a las víctimas -«el Partido Popular no ha cambiado», afirmó- y, muy en particular, «a las 25 familias de las víctimas de De Juana en un momento en que lo necesitan y lo merecen». Además, y sólo en segundo lugar, el número dos del PP hizo hincapié en la otra gran demanda de la convocatoria, por la que se exige al Gobierno que no reduzca en una sola hora la prisión pendiente a De Juana y le obligue a cumplir íntegra la condena.

El presidente de la AVT, Francisco Alcaraz, puso las cosas fáciles ayer al PP al asegurar, en rueda de prensa, que el acto del sábado, que llevará el mismo lema de las convocatorias anteriores -Memoria, Dignidad y Justicia- será «de denuncia», no a los jueces, sino a los políticos, como responsables de la legislación que va a permitir la excarcelación, según informa Servimedia.

De hecho, la AVT recalcó posteriormente en un comunicado que «la convocatoria no tiene por objeto atacar de ninguna manera al Tribunal Supremo por la decisión adoptada recientemente que rebaja la pena a De Juana».

«La gente de bien de nuestro país», dijo Alcaraz, «no concibe que quede en libertad un asesino que sólo ha cumplido 18 años por matar a 25 personas, que amenaza, que no se arrepiente, que enaltece el terrorismo y que seguirá ayudando a ETA hasta lograr sus objetivos».

Aunque nada dijo Acebes al respecto, la dirección del PP puso ayer énfasis en trasladar su «pleno respeto por la Justicia», en la misma línea que la AVT.

La concentración contará también con el respaldo del Foro Ermua, la Confederación Española de Policía (CEP), la asociación La Rosa Blanca y la plataforma Peones Negros, según informa Europa Press. En el caso de estos cuatro colectivos, no hubo reparo alguno ayer en hacer explícito en rueda de prensa tanto el apoyo al acto como su desacuerdo con la decisión del Supremo.

El portavoz del Foro Ermua, Enrique Zubiaga, criticó las declaraciones de los dirigentes socialistas Ramón Jáuregui, Manuel Chaves y José Blanco porque parecen integrar lo que denominó una «asociación en defensa de De Juana».

El responsable de Relaciones Institucionales de la CEP, Isidoro Zamorano, dijo que se suman a la marcha porque «las víctimas son las grandes olvidadas» en el proceso de paz y porque, pese a la falta de «claridad» del Ejecutivo, da la impresión «de que sigue negociando con ETA».

Mientras, el portavoz de La Rosa Blanca, Alejandro Campoy, afirmó que en el País Vasco vive en un «régimen nazi» y que es «inadmisible» el chantaje que realiza De Juana al Estado de Derecho.