JOSÉ MANUEL BLANCO
SALAMANCA.-
M. H. T., policía nacional de 56 años, falleció degollado en su domicilio de Salamanca el pasado domingo. Su mujer y su hijo, toxicómano de 30 años, también resultaron heridos por arma blanca en el mismo suceso.
Debido al secreto sumarial, se desconocían al cierre de esta edición las circunstancias en las que se produjo el suceso.
El servicio de emergencias 112 de Castilla y León recibió a media tarde del domingo el aviso de un posible suicidio en una vivienda del barrio salmantino de San José. Al llegar al lugar, los sanitarios se encontraron al fallecido con un corte en el cuello que le habría seccionado la yugular y a su mujer y a su hijo heridos por arma blanca, por lo que fueron trasladados al hospital.
La Policía Nacional piensa que el fallecido podría haberse suicidado y que sus familiares resultaron heridos cuando intentaban evitarlo. También se estudia una posible pelea entre el padre y el hijo. La madre habría resultado herida al intentar separarlos.
El fallecido se encontraba en la reserva de la Policía desde 2006 y regentaba un taller mecánico. El hijo iba a ingresar ayer en un programa de desintoxicación. Según los vecinos, había mantenido enfrentamientos anteriores con la familia por su adicción.
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