La fecha prevista para el lanzamiento del Fiat 500 era septiembre pero ahora se ha adelantado al 4 de julio, lo que obligará a la filial española a retocar sus planes de comercialización, ya que contaban con disponer plenamente del pequeño turismo en el último trimestre del año. Fiat Auto no ha dado ninguna explicación sobre las razones de este cambio de fechas. A nivel global, las ventas previstas del Fiat 500 son de 58.000 unidades este año y 120.000 a partir de 2008.

Más que completar la oferta de coches pequeños del fabricante italiano, el 500 tiene la aspiración de convertirse en un utilitario urbano de diseño destinado al público juvenil y capaz de competir con rivales como el Smart de Mercedes-Benz. Pese a la llegada al mercado europeo de múltiples modelos procedentes de marcas de todo el mundo a este segmento, el grupo italiano ha dejado caer que sus precios rondarán los 10.000 euros.

El 500 se fabricará en la planta que el grupo italiano tiene en Polonia y que está especializada en vehículos pequeños. La fábrica construyó el año pasado 287.000 unidades de los modelos Panda y 600 y será también el centro de producción de la nueva versión del utilitario Ka del grupo estadounidense Ford. Antes de ser trasladado a Polonia, el Ka se fabricaba en la planta española de Almusaffes y la nueva versión tiene previsto llegar a los mercados a mediados de 2008. La alianza entre Fiat y Ford se llevó a cabo tras la ruptura del fabricante italiano con General Motors y fue una de las primeras decisiones adoptadas por el consejero delegado de Fiat Sergio Marchionne.

El directivo ha planteado un modelo de negocio basado en una mayor frecuencia de lanzamientos -de 23 hasta 2010- y alianzas que reduzcan los costes de desarrollo al tiempo que permiten el acceso a mercados emergentes como China, la India o Turquía.