Fue el espectáculo inaugural del Fórum de las culturas en 2004 en Barcelona, y se repitió un día tras otro hasta el fin del evento. El espectáculo Moure el món, sin embargo, podría haber sido plagiado. Así lo entiende el creativo Joan Díaz, que ha demandado a la organización del Fórum y a la productora Focus por una presunta apropiación de su proyecto.
El juzgado mercantil número 3 de Barcelona celebró ayer la audiencia previa del procedimiento, en el que los abogados de la Asesoría Jurídica de las Artes Josep Coll y Enric Piñana, representantes de Díaz, pidieron la práctica de prueba para demostrar la realidad del supuesto plagio.
El magistrado José María Fernández Seijoo ha aceptado como prueba las declaraciones de Xavier Marcet, Jaume Pagés y Jordi Oliveras, entonces jefe de comunicación, consejero delegado y director general, respectivamente, del evento.
Según Efe, el juez ha rechazado en cambio la prueba testifical también solicitada del ministro de Industria Joan Clos, entonces alcalde de Barcelona, por entender que «no tendría ningún sentido» porque el proyecto «no se le puede atribuir exclusivamente a él».
En su demanda, Joan Díaz, creativo de Vinarós de 32 años, explica que a finales de 2001 ideó un proyecto bajo el título Mar de signes que pretendía ser una alegoría de la paz y el intercambio de culturas. Tras registrar el proyecto, lo ofreció a través de una empresa especializada en la creación de parques temáticos a la organización del Fórum, pero no supo nunca si su iniciativa había sido estimada o rechazada.
Entre otras similitudes que Díaz ha detectado en los espectáculos del Fórum y el suyo, destaca la utilización central de un globo terráqueo que se abre y se cierra cuando el sol sale y luego se pone, hasta convertirse en un nenúfar.
La instalación El árbol de la memoria o bien las escalinatas de la zona central del recinto también presentan características, a criterio del demandante, claramente copiadas de su trabajo Mar de signes.
Para la defensa del demandante, las similitudes son numerosas, y muchas de ellas están relacionadas con la distribución de los espacios en el recinto, que sigue un ordenamiento muy específico.
El creativo reclama un millón de euros por daños morales y otros tres millones de euros por daños patrimoniales, es decir, por los beneficios que no habría recibido de la explotación de su obra. Según explicó uno de sus letrados, Josep Coll, Díaz «está hundido» y ha padecido ansiedad y depresión, además de problemas físicos, ya que también ha sufrido un infarto.
Los letrados del Fórum y de Focus defendieron que la demanda debería dirigirse contra los titulares de los espectáculos que habrían sido plagiados y que constan en el registro de la propiedad intelectual, pero Fernández Seijoo rechazó esta petición al considerar que el demandante tiene derecho a llevar a juicio «a quien crea oportuno».
El proceso seguirá el próximo mes de julio con la práctica de la prueba testifical acordada ayer en la audiencia previa, según explicaron fuentes judiciales.
La ordenación de espacios de un experto en parques temáticos
BARCELONA.- «Cada tarde cuando cae el sol Moure el món muestra a partir de una iconografía espectacular que el diálogo entre las personas y las culturas es el único antídoto para el caos la injusticia y la violencia». Así reza la presentación del espectáculo permanente que estuvo en el Fórum de las Culturas el 2004.
Bajo la dirección de Hansel Cereza y Alfonso Flores, el proyecto llevó a la construcción de una gran esfera de 30 metros, a partir de una estructura oxidada que salía de las aguas del puerto.
El demandante apoya su reclamación con un dictamen del arquitecto Mariano Martín Muñoz y la licenciada en Filosofía Gema Martín sobre las coincidencias de los proyectos.
Por su parte, el letrado Josep Coll señaló que el proyecto del creativo era «el germen de un macroproyecto que luego se convirtió en el Fórum», ya que Díaz «lo dibujó, lo dividió en diferentes partes y ordenó la colocación de los diferentes elementos». «Él es como un padre que está viendo a su hijo, lo que todo el mundo vio en el Forum, se basó en su idea», explica el abogado.
El otro espectáculo, la exposición «Veus, Voces», tenía como objetivo presentar itinerarios virtuales para fomentar la comunicación humana y la diversidad lingüística y cultural. Planteada mediante una serie de experiencias audiovisuales e interactivas con el fin de que el visitante pueda reflexionar sobre las diferentes culturas presentes en el mundo y la necesidad de crear un puente de diálogo entre ellas.
Para los abogados de Joan Díaz, tanto el uno como el otro son espectáculos inspirados por la organización de los espacios y la planificación de su desarrollo en el proyecto inicial de su cliente, que ha colaborado con otros proyectos de parques temáticos.