El crecimiento fue de tal tamaño que los ejecutivos ya dan por hechos que será imposible volver a marcar crecimientos tan importantes durante los próximos años, durante los cuales los beneficios, por ejemplo, crecerán en porcentajes de en torno al 30%. Pese a las estrategias de futuro que se hayan podido idear, el crecimiento a corto plazo pasará por la alta rotación de activos que caracteriza al grupo y un incremento paulatino del valor de cada una de ellas.El presidente de Renta Corporación, Luis Hernández de Cabanyes, explicó ayer que el grupo seguirá efectuando entre 30 y 40 operaciones por año, aunque tendrán un tamaño medio de 25 millones de euros, que ofrecerán un rentabilidad media de entre 25 y 30 millones.

Ni integración de empresas ni una expansión internacional desaforada.De hecho, no hay de momento nuevas ciudades en las que Renta Corporación pueda entrar. Barcelona, Madrid, París, Londres y Berlín son los mercados que marcarán el ritmo porque «todavía tienen recorrido». Por su escaso peso específico, sólo acumula el 1% de la facturación del grupo, Berlín apunta como una de las capitales con más recorrido en los próximos años. El director general, Enric Venancio, señaló que esta ciudad debería superar «el 5% de la facturación anual y apunta el 10%».

César Bardají, que está tomando el relevo para convertirse en el nuevo consejero delegado del grupo tras abandonar la aseguradora Winterthur, explicó que apostará por la «velocidad» para obtener resultados en la compañía.