Viernes, 23 de febrero de 2007. Año: XVIII. Numero: 6277.
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El caso del coche rayado de la diputada
El vehículo estaba dentro del Congreso, en una zona donde sólo pueden entrar los parlamentarios
AGUSTIN YANEL

MADRID.- Ana Belén Vázquez, diputada del PP por Orense, no daba crédito ayer por la mañana a lo que veía: su coche, situado en un aparcamiento del Congreso al que sólo pueden entrar los parlamentarios, había sido rayado de arriba abajo con un objeto punzante.

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Como a esa zona únicamente acceden los diputados, ¿lo ha hecho uno de ellos? ¿Acaso otra persona ha podido violar la seguridad de uno de los edificios más protegidos de España y ha entrado? Las preguntas se agolpan en su mente, y no tiene respuesta. Por eso, ha presentado una denuncia ante la Policía para que investigue lo ocurrido.

Además de diputada, Ana Belén Vázquez es licenciada en Derecho, teniente de alcalde del Ayuntamiento de Bande, agente del Cuerpo Nacional de Policía y dirigente del PP.

El martes último, como hace cada semana que hay Pleno, llegó al Congreso y aparcó su vehículo en la zona destinada a los diputados. En la noche del miércoles, después de la sesión, un diputado de otro grupo que deja su coche junto al de ella vio los arañazos. Intentó localizarla por teléfono, pero no lo logró.

Ayer, ese diputado la esperó a la salida del Pleno. «Baja a ver cómo está tu coche», le dijo. El vehículo, un Audi-4 de color negro, tenía rayado el lateral del copiloto. Y no se trataba de un rasguño accidental provocado por otro vehículo al aparcar, por ejemplo, sino de una raya con curvas e incluso con algún dibujo.

En los días de Pleno -de martes a jueves- en esa zona sólo pueden aparcar los diputados. En el salpicadero del coche dejan una credencial azul, en la que constan su identidad y fotografía. Además, su vehículo estaba en una zona que no controlan las cámaras de vigilancia.

«Eso quiere decir que quien lo ha hecho sabía de quién era el coche», declaró esta diputada a EL MUNDO. «Y me asusta que ocurra esto en el Congreso, donde se supone que existe la máxima seguridad», añadió.

Ella quiere que estos hechos no se vuelvan a repetir. «Si alguien tiene algo que decirme, que lo haga en la cara. Yo quiero ejercer mi derecho a la libertad de expresión y a mi actividad política», afirmó.

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