Estadísticas malas hay muchas si hablamos del Atlético contra el Real Madrid. Han pasado ocho años desde la última victoria en el Calderón. Nunca antes, a estas alturas de Liga, habían tenido los rojiblancos la opción de estar por encima del Madrid.Fernando Torres no le ha marcado a los blancos en partido oficial...«Yo afronto este partido como cualquier otro. No tengo revanchas con nadie», contó, refiriéndose también, de paso, a su rifirrafe con Capello tras el partido de ida, cuando el italiano le llamó «tramposo».

El caso es que El Niño, que esta semana ha hecho la segunda parte de su tour mediático anual, explica con argumentos su optimismo.Tiene razón cuando dice que, en los últimos años, el Madrid siempre ha estado a un nivel muy superior al Atlético, algo que no ocurre este año. «Desde que yo estoy aquí ellos han peleado por el título y nosostros estábamos en mitad de la tabla. Ésa es la realidad.Y eso hace muy difícil competir contra ellos en los últimos años», dice. En el presente curso, al paso por la jornada 24, el Atlético se mide de igual a igual con el Madrid. Está tres puntos por debajo, y si gana hoy accederá al cuarto puesto de la tabla, por delante del rival. «Sabemos que es un partido que supone más que tres puntos para la gente, y para nosotros también».Eso de que son más de tres puntos puede que no tenga sólo un matiz sentimental, sino también práctico.

Si el Atlético gana hoy sumará prácticamente cuatro puntos. Los tres que otorga la Federación y un cuarto a emplear en caso de empate a puntos, llamado gol-average. La sensación del capitán se ha extendido por todo el vestuario. Dice Torres que es el partido clave del año. «Lo es por el momento de la temporada en el que llega. Este mes te va a dar lo que vas a ser al final.Si vas a engancharte a los equipos de arriba, si te vas a quedar en tierra de nadie o si vas a pelear por estar en Europa», objetivo este último que pregonan todos y cada uno de los empleados del Atlético. «Hombre, para qué engañarnos, queremos la Champions, pero firmamos ya el quinto puesto», dicen con la voz baja, no sea que suene a conformismo.

A sus 22 años, con ocho derbies disputados -cinco derrotas y tres empates-, Torres quiere que el Madrid les dé la pelota, a pesar de que los recuerdos indican que el Atlético no sabe muy bien qué hacer con ella cuando la tiene. Quiere un partido similar al de la primera vuelta, donde ellos fueron superiores y sólo pudieron llevarse un punto del Bernabéu. Quiere también olvidar lo de Sevilla, donde el equipo no dio lo único mínimamente exigible a un colectivo de jugadores: actitud. «Por suerte, en fútbol cada semana hay una revancha. No dimos la talla ante el Sevilla, y aunque el Madrid siempre es el Madrid, creo que es la hora».