C. E. C.
MADRID.-
Era la frase más repetida entre los jugadores rojiblancos. «Se han escapado vivos, hemos podido golear y el árbitro no nos ha ayudado». Era un mensaje monocorde y lastimero que se ajustaba a la realidad y que no encontraba consuelo en argumentos como la mejora del juego del equipo dirigido por Javier Aguirre o el fin de la maldición de Fernando Torres ante su más odiado enemigo. Por fin marcó un gol en un derbi que debió ser también el del primer triunfo de su equipo ante el Real desde 1999. Pero no todas las maldiciones se van a espantar en el mismo día.
«Es increíble. Casillas ha estado magnífico y nos ha parado varios remates que eran de gol. De haber entrado estaríamos hablando de una goleada. Y sin embargo, nos vamos con un simple empate. Hemos perdido una gran oportunidad, pero más no podíamos hacer. Además, debimos ponernos 2-0 muy pronto. No sé por qué el árbitro anuló el gol de Perea y en esa misma jugada hubo un claro penalti a Agüero. Todo se puso en contra, pero al menos hemos demostrado que podemos jugar bien y aspirar a grandes cosas», comentó Luccin, sin duda uno de los más lúcidos.
Galletti mantuvo ese discurso: «Le hicieron penalti al Kun y pudo ser la gran oportunidad para rematar al Madrid. Y durante todo el partido dominamos claramente. Merecimos ganar, pero ellos tuvieron suerte con el gol de Higuaín y volvieron a echarse atrás. Este es el camino, porque la gente se ha ilusionado mucho».
El empate final mantiene al Atlético tres puntos por debajo de la zona de la Liga de Campeones. En el partido del próximo domingo frente al Recreativo de Huelva no jugarán Luccin y Galletti por acumulación de amonestaciones.
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