Los hechos tuvieron lugar sobre las 9.15 horas, poco antes de que la decena de niños del pueblo subieran al autobús de ruta escolar rumbo al Centro Rural Agrupado situado a escasos kilómetros de Collado Hermoso (160 habitantes). Según pudo saber EL MUNDO, Julián Martín había llamado minutos antes a su ex mujer para pedirle ver a las niñas antes de que éstas subieran al autobús. «Querría darles unos tebeos y unos cuentos y quería verlas antes de que se fueran al cole», le había dicho a Angelines Huerta por teléfono en un gesto bastante habitual en él.

Las niñas, Elsa, de 10 años, y Blanca, de ocho años, bajaron solas desde la casa. Tras darle un beso a su padre, la pequeña se despidió y subió a por su mochila. Julián sacó entonces el cuchillo jamonero, que «había escondido entre las ropas», y asestó a su hija mayor varias puñaladas. Elsa intentó defenderse arrebatándole el cuchillo, lo que le causó algunas de las 15 graves heridas que presenta en las manos, abdomen, hemitórax y espalda.

Los chillidos de auxilio de la niña los oyó su tío Pedro, que vive en la casa contigua y que salió en su defensa al mismo tiempo que lo hacían la madre y la abuela de Elsa. Mientras la familia avisaba a urgencias, el agresor huyó en su vehículo hacia el pueblo de sus padres, Santiuste. Hasta el lugar acudió una ambulancia de Navafría que prestó los primeros auxilios a la niña. Después fue trasladada en un helicóptero de Sacyl hasta el Hospital Universitario de Valladolid.

Tras dar varias vueltas a la plaza mayor «sin rumbo y como sin saber bien qué hacer», señalan unos vecinos que observaron con extrañeza sus movimientos, Julián regresó de Santiuste a Collado y se estrelló con su vehículo contra una vivienda del pueblo, situada casi enfrente de la casa su ex mujer e hijas. Posiblemente intentaba quitarse la vida.

La vecina que habita esta vivienda salvó la vida porque se había levantado antes que el resto de los días para ir a Madrid al médico. El impacto no llegó a abrir un boquete, pero precipitó el hundimiento de la pared interna del dormitorio donde la mujer acababa de hacer la cama.

El golpe provocó la «fractura abierta de las dos piernas» del agresor, que fue trasladado al Hospital General de Segovia, donde en la tarde de ayer estaba previsto practicarle las primeras intervenciones. Julián Martín permanecerá ingresado en el Módulo Penitenciario del citado centro sanitario.