La respuesta de la empresa no se hizo esperar. Enel redactó dos páginas en las que detalla los contactos de su cúpula directiva con el Gobierno, pero no especifica si solicitará participar en la gestión ni cuál será su posición en la junta de accionistas de la eléctrica, el próximo día 20. Por tanto, la CNMV continuará examinando en los próximos días el impacto de la polémica operación.

El organismo no lo tiene nada fácil, puesto que no existen precedentes similares en España. Es cierto que la ley permite la compra de una participación inferior al 25% sin necesidad de lanzar una oferta sobre el 100%. La diferencia es que Enel ha dado el paso en pleno proceso de aceptación de la OPA de E.ON. A estas alturas de la puja, la empresa alemana no tiene margen de maniobra para mejorar el precio. Y si no logra el capital deseado (50,01%) podría verse obligada a retirar su oferta, dejando en la estacada a miles de accionistas minoritarios.

Los pequeños ahorradores no sólo no se han beneficiado de los 39 euros por acción que está pagando Enel. En el caso de que E.ON tire la toalla tampoco podrán cobrar los 38,75 euros de la OPA. Y lo que es peor: sus títulos de Endesa, con mucha probabilidad, se desplomarán en Bolsa.

Preocupación

Eso es lo que más preocupa a la CNMV. En su carta, pregunta a Enel «si tiene decisión tomada en relación a la OPA realizada por E.ON sobre Endesa, que está actualmente en periodo de aceptación y cuál es el sentido de la misma». También, «si tiene intención de participar en la gestión de Endesa y en sus órganos decisorios».

Conthe reclama, además, información exhaustiva sobre la compra del paquete de acciones y una lista detallada de las «relaciones escritas o verbales» mantenidas «con alguno de los accionistas significativos de Endesa».

La respuesta de Enel llegó a la sede de la CNMV en Madrid pasadas las 17.00 horas. La compañía italiana asegura que adoptó la decisión de entrar en la eléctrica española en la reunión del consejo de administración «celebrado la tarde del 27 de febrero de 2007». La empresa comandada por Fulvio Conti señala que cerró la compra del 10% de las acciones «en escasos minutos, desde las 18.26 hasta las 18.55 horas, al precio de 39 euros por acción».

La eléctrica recuerda su intención de aumentar su participación hasta el 24,99%, «siempre que obtenga las autorizaciones pertinentes de las administraciones españolas y siempre que las condiciones del mercado lo permitan».

Sin embargo, en contra de lo solicitado por la CNMV, Enel no confiesa cuál será su postura respecto al asunto clave de la junta de accionistas de Endesa (el levantamiento de blindajes). Tampoco adelanta cuál será su decisión sobre la OPA de E.ON, a pesar de que el periodo de aceptación finaliza en menos de un mes. «La posibilidad e intención de Enel de participar en la gestión de Endesa y de sus órganos institucionales dependerá, en particular, de la dimensión relativa de la participación de Enel sobre Endesa», concluye la carta de la compañía pública, firmada por el secretario del consejo, Claudio Sartorelli.

Ayer, la Asociación Española de Accionistas Minoritarios de Empresas Cotizadas (AEMEC) reclamó a la CNMV que obligue a Enel a lanzar una OPA sobre el 100% de la empresa española. Sus portavoces advirtieron que la operación italiana «supone un claro perjuicio» para los pequeños ahorradores, ya que les priva de la prima de control, según informa Europa Press. Este nuevo movimiento corporativo, añadió AEMEC, «supone frustrar la buena evolución que estaba teniendo en el mercado la cotización de Endesa».