El director de TVE, Javier Pons, inició ayer los contactos con varios de ellos para cerrar un acuerdo cuanto antes. En Francia, de donde procede el formato, el responsable de elegir a los entrevistadores ha sido Sofres y no se descarta que sea esta misma casa quién lo haga aquí.

«Vamos a ser muy cuidadosos en el proceso de selección, porque esas cien personas deben representar fielmente la demografía de todo el país», asegura Pons. El celo de TVE llegará hasta el punto de, «si no aislarlas, sí protegerlas de cualquier tipo de presión externa», dice el director de la cadena pública.

Para ello, no se facilitará la identidad de los participantes en el programa hasta unas horas antes del inicio del mismo y el día anterior serán concentradas en un hotel para que nadie pueda acceder a ellas. Igualito que los jurados en las películas de Hollywood. Sólo que en este caso serán ellos quiénes someterán a un severo interrogatorio a Rodríguez Zapatero y a Rajoy, que ya han aceptado responder a los ciudadanos a través de esta fórmula.

La duración del programa está por decidir todavía, si bien Pons calcula que se situará entre 90 y 120 minutos. «Hay que dar tiempo para que la gente se exprese», afirma el director de TVE, convencido de que «nos van a sorprender muchas de las preguntas, sobre todo las referidas a cuestiones que no están en la agenda política, pero sí son una constante en la vida diaria».

Por razones obvias, las cien personas que participen en cada uno de los espacios serán diferentes, pero todo lo demás será idéntico. Desde el plató y el conjunto de la escenografía, pasando por la promoción de los programas. «Además de la frescura que introduce esta fórmula en el género de la entrevista, es un paso más que confirma nuestra voluntad de hacer de TVE la televisión de los ciudadanos», aseguró ayer JavierPons.

TVE ha comprado los derechos del formato a la cadena francesa TFI, que lo explota bajo el título J'ai une question à vous poser (Tengo una pregunta para usted), con gran éxito de público. Por el programa han pasado desde el ultraderechista Jean- Marie Le Pen, pasando por los dos candidatos a la presidencia de la República con más posibilidades -Ségolène Royal y Nicolas Sarkozy, o el líder antiglobalización José Bové.

La audiencia registrada en Francia por todos los programas ha sido muy alta. La entrevista a Ségolène Royal fue vista por 8,91 millones de personas -un 37% de cuota de pantalla-, mientras que la de su rival y ministro del Interior, Nicolas Sarkozy, congregó a 8,24 millones de espectadores, con un 33% de audiencia.

Al igual que en Francia, el programa tendrá un moderador, en este caso será Lorenzo Milá, conductor del telediario de la noche de TVE, y se emitirá en horario de máxima audiencia.

TVE ha optado por este formato tras fracasar su propuesta de que las entrevistas fueran realizadas por Milá y los presentadores de los principales telediarios de las cadenas privadas. El proyecto no cuajó al negarse Cuatro a participar y arrastrar con su decisión a Antena 3 que la había condicionado a la presencia de todas. Telecinco y la Sexta siempre estuvieron de acuerdo en colaborar en el proyecto de la cadena pública.