Los guionistas de Los hombres de Paco sorprendieron hace dos semanas a más de cuatro millones de espectadores con la repentina muerte de Bernarda, la novia del subinspector Mariano.Sin embargo, éste no será el único sobresalto que les espere a los incondicionales de la serie... Antes de que acabe la cuarta temporada -en el mes de julio-, y según su productor ejecutivo, Alex Pina, «Los hombres de Paco tienen ya preparada más de una sorpresa» que alterará el transcurso de la trama.
Reservado y muy celoso de las novedades que se introducirán, aunque visiblemente «feliz» por los picos de audiencia conseguidos hasta ahora, Pina atribuye el éxito de la primera comedia española negra del género policíaco a dos aspectos: «A la fragmentación actual de la audiencia, que nos permite hacer cosas más arriesgadas, y a un modelo dramático que combina tragedia y comedia».
Pregunta.- De aquí al final de la cuarta temporada, que acabará el mes de julio, ¿con qué novedades se va a encontrar el espectador?
Respuesta.- [Entre risas, y después de pensárselo mucho] A ver..., habrá dos grandes sorpresas. Una será tremenda, pondrá la comisaría patas arriba, dará un giro a la serie y afectará directamente a uno de los protagonistas.
P.- ¿Habrá más muertes?
R.- No exactamente, aunque tiene mucho que ver con la muerte en sí y el pasado de alguno de nuestros personajes.
P.- ¿Y la segunda?
R.- Tendremos nuevos protagonistas. Uno de ellos entrará a formar parte de la serie para convertirse directamente en el tercer vértice de nuestra historia de amor principal.
P.- ¿Qué tiene Los hombres de Paco para superar los cuatro millones de seguidores?
R.- Utilizar desde la primera temporada la misma fórmula, trabajar con una intensidad dramática al límite y buscar esa perspectiva cómica que empatiza tanto con el público.
P.- Y además, el humor negro parece darle un toque bastante peculiar a la serie...
R.- Desde luego, el humor negro es algo muy español desde El verdugo de García Berlanga. Forma parte de nuestra idiosincrasia.Pero no deja de ser un arma de doble filo. Por eso tratamos de cuidar mucho que la comicidad de Los hombres de Paco no ofenda a nadie. Aunque, si pese a evitarlo, ofendemos a alguien, es el espectador quien tiene la última palabra... Sólo debe coger el mando y cambiar de canal.
P.- ¿Por qué cree que es tan difícil hacer reír?
R.- No lo sé. En la teoría, sabemos cuáles son los ingredientes del éxito; pero no las proporciones de la mezcla. En eso precisamente, está el oficio. Es difícil hacer reír, pero también lo es conmover y simpatizar con una audiencia cada vez más exigente.
P.- ¿La ficción norteamericana, que tan buena acogida tiene en España, hasta qué punto perjudica la producción propia?
R.- Las series americanas son una fuerte competencia que nos está comiendo terreno. Pero la fragmentación de la audiencia ayuda a que los programadores vean que hay otra forma de hacer ficción. Eso nos permite ser mucho más arriesgados.