Permisivo. RAMON CALDERON (Real Madrid), 56 años, empresario; por dar luz verde para que Ultras Sur, reconocido por su violencia, mantuviera su cuarto de armas dentro del Bernabéu. Según dijo hace unos meses el presi blanco, «no se les puede discriminar, porque un día alguien les puso un estigma». Tras la caída de la portería en la Champions de 1998, el grupo de ultraderecha autoproclama hoy su «segunda época dorada».

Reincidente. ANA URQUIJO, (Athletic de Bilbao), 53 años, abogada; por pagar multas por violencia en los dos últimos encuentros en casa. Uno contra el Betis, por un petardo lanzado al césped. Ya el año pasado la pólvora alcanzó también a dos jugadores del Atlético.

Indiferente. JUAN BAUTISTA SOLER, (Valencia CF), 51 años, promotor inmobiliario; no ha vivido demasiados sustos de los Yomus, la peña ultra ché. Nada tuvieron que ver en la suspensión del Valencia-Depor de Copa del año pasado. El monedazo a un linier llegó desde la tribuna. El agresor aún sigue sin ser identificado.

Cordial. MIGUEL FUENTES, (Real Sociedad), 43 años, empresario hostelero; mantiene buena relación con la Peña Múgica, a los que da una sala para los bombos. La muerte de Aitor Zabaleta en 1998 sigue en la memoria de su afición.

Al margen. AUGUSTO CÉSAR LENDOIRO, (Deportivo), 61 años, empresario; no quiso financiar los viajes de los Riazor Blues. Aunque sí disfrutan de un cuarto para sus banderas. Estuvieron a punto de autodisolverse tras la muerte de un joven en un Depor-Compostela.

Apartado. CARLOS MOURIÑO, (Celta de Vigo), 63 años, empresario; no concedió a los Celtarras un cuarto dentro de Balaídos. Mejor se lleva con los ultras, nacionalistas, Fernando Vázquez. El técnico gallego incluso participó en una conferencia de uno de los colectivos político-sociales en sintonía con Celtarras.

Despreocupado. FRANCISCO MENDOZA, (Recreativo de Huelva), 58 años, constructor; no paga los viajes del Frente Onuba. Pero estos 300 ultras cuentan con cuarto propio dentro del Colombino y con el parking del campo para preparar sus pancartas.

Calmado. VICENTE GRANDE, (Mallorca), 52 años, constructor; por no sobresaltarse desde que accedió al cargo. En la isla sólo existe un grupo violento y casi residual, Supporters Mallorca.Como una peña más, goza de la subvención que recibe la federación de peñas.

Debutante. RAUL FONT, 54 años, concejal de Tarragona y presidente del Nástic; con sólo un puñado de meses en el cargo, ya conoce cómo se las gastan Ultras tarraco y Furia Grana.

Los menos pro «ultras»

Censor. JOAN LAPORTA, (Barcelona), 44 años, abogado, por perseguir a los temidos Boixos Nois hasta echarlos del Camp Nou. Asaltos al palco y varias redadas fueron la réplica del grupo, de tendencia españolista. Más permisivo es con otras secciones ultra de marcado carácter independentista.

Continuista. ENRIQUE CEREZO, (Atlético de Madrid), 59 años, productor cinematográfico; heredó la rigidez de los últimos años de Jesús Gil, quien quitó al Frente Atlético el cuarto del material en el fondo sur y las subvenciones para viajes, a partir de que empezaran a pegar a sus jugadores. A día de hoy, entidad y radicales conviven sin más.

Eficaz. DANIEL SANCHEZ LLIBRE, (Espanyol), 57 años, empresario conservero; desde la mudanza perica a Montjüic, su presión ha sido asfixiante para las Brigadas Blanquiazules. El grupo ha entrado en una fase terminal que podría conducir a su disolución.

Modélico. FERNANDO ROIG, (Villarreal), 60 años, empresario de la azulejera Pamesa; dirige el único club de Primera División sin grupo violento. Sus 17.000 socios son el activo de una entidad de la que Roig posee más del 90% de las acciones, y que por tradición no ha sido nido de ultras.

Concienciado. PATXI IZCO, (Osasuna) 60 años, asesor inmobiliario-fiscal; se esfuerza en controlar a los Indar Gorri, lo que ya le ha costado una canción de los ultras: «Izco quédate, quédate sin respiración».No le perdonan el cambio de nombre de El Sadar: Reyno de Navarra.

Recién llegado. EDUARDO BANDRÉS, (Zaragoza), 50 años, político; desde que llegó al cargo ha batallado con los dos grupos maños: Colectivo 32, apolíticos, y Ligallo, mucho más violentos y de ultraderecha. Están molestos por su cambio de ubicación en el campo.

Fichado. JULIO ROMERO, (Levante), 49 años, asesor fiscal; está en el ojo del huracán del grupo de ultraderecha minoritario Ultras Levante por los fichajes de jugadores de raza negra. Con Granas Sur sólo mantienen la convivencia.

Tenaz. ANGEL TORRES, (Getafe), 48 años, intermediario de terrenos; quitó su espacio en el estadio a los Comandos Azules. ¿La consecuencia? Roces de los radicales con directiva, Policía y resto de la afición.

Consecuente. FRANCISCO PERNIA, (Racing de Santander), 55 años, ex consejero del Gobierno cántabro; retomó la línea de anteriores directivas. Eliminó todas las entradas de pie. El cambio ha traído mucha más tranquilidad a la grada de Juventudes Verdiblancas./

CLAVES

PARTIDO DE RIESGO

Se disputaba el Partido Betis-Sevilla, de Copa del Rey, en el estadio del Betis. / Fue suspendido en el minuto 57 después de que un botellazo dejara inconsciente a Juande Ramos. / «Hemos echado gasolina al fuego», decía el entrenador sevillista, ya recuperado, apuntando a los directivos de los equipos. / El comité de competición ha decidido el cierre del estadio del Betis por tres partidos.