Así lo anunciaron el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, y el conseller d'Interior, Joan Saura, en una comparecencia informativa tras la celebración de la segunda Junta de Seguridad de Cataluña que se lleva a cabo desde la entrada en vigor del Estatut.

Si una palabra resonó ayer en el Palau de la Generalitat ésta fue la de «eficacia». A la voluntad de eficacia remitieron ayer los máximos responsables de Interior del Gobierno central y el Ejecutivo catalán para justificar el acuerdo alcanzado, que supondrá que los Mossos participen en el dispositivo aduanero donde ahora intervienen efectivos del Cuerpo Nacional de Policía, la Guardia Civil y el funcionarios del Ministerio de Economía y Hacienda especializados en impuestos.

La presencia de la policía autonómica, según explicó el conseller Joan Saura, será de carácter informativo y para mejorar la fluidez comunicativa y la coordinación entre los distintos cuerpos policiales que tienen competencias en el territorio catalán. Así, según Interior, los mossos no inspeccionarán los vehículos en la frontera, sino que su función se limitará a acceder a datos acerca del tráfico de drogas y la inmigración ilegal, que son los principales hechos delictivos relacionados con el paso fronterizo.

Un Comité Policial

En aras de mejorar la ya «óptima coordinación» a la que aludió Rubalcaba, la Junta de Seguridad también decidió la creación del Comité Policial de Cataluña, que tiene por objeto canalizar las relaciones entre los cuerpos policiales con reuniones periódicas, así como la constitución de un protocolo de coordenación operativa policial entre el Ministerio y el Departament con el mismo objeto.El Comité estará dirigido por el delegado del Gobierno en Cataluña, Joan Rangel, y el secretario de Seguretat Pública de la Generalitat, Joan Delort.

Puestos a ejemplificar, Saura señaló que los Mossos utilizarán el mismo patrón de actuación en materia de extranjería que los efectivos de la Guardia Civil.

En la Junta, que fue presidida por el president de la Generalitat José Montilla, se abordó también un primer balance del despliegue del protocolo de colaboración antiterrorista que se firmó en la Junta anterior, el 14 de septiembre.

Alfredo Pérez Rubalcaba y Joan Saura convinieron en la importancia de que los distintos cuerpos policiales intercambien información, y destacaron que los protocolos son instrumentos muy importantes para garantizar la eficacia del control policial.

De hecho, Rubalcaba señaló que «la base de una buena política antiterrorista es la prevención», y la información juega un papel primordial en este punto, en tanto que «bien preciado que cuesta compartir, por lo que es satisfactorio ver que estamos reunidos y la compartimos».

En este sentido, el ministro de Interior constató que la integración de los Mossos en el centro de coordinación antiterrorista «va bien» porque se han superado las «reticencias» que había entre los cuerpos policiales «y ha aumentado el nivel de confianza».

La creación del comité policial y la puesta en marcha de nuevos protocolos que pretende coordinar las labores de las distintas policías que actúan en territorio catalán llevó a Rubalcaba a rememorar la serie televisiva Canción triste de Hill Street, que arrancaba cada capítulo con la reunión de los efectivos de una comisaría. «Mossos y Policía Nacional se reúnen igual», señaló, «y cuanto más se reúnan mejor, cuanta más información compartan, mejor».

Durante la Junta de Seguretat, que el ministro propuso que se repitiera con una periodicidad semestral, Interior y Generalitat acordaron poner en marcha mecanismos para desarrollar prescripciones en materia de seguridad privada y política internacional, de acuerdo con la previsión del Estatut.

Los nuevos intrumentos anunciados ayer, así como la decisión de integrar Mossos d'Esquadra en los centros de coordinación de los puestos hispanofronterizos de Girona y Lleida necesitan el respaldo financiero para su buen desarrollo, y conscientes del déficit actual de la plantilla de los efectivos de la policía autonómica, cuando aún no se ha culminado el despliegue en todo el territorio, llevaron al conseller d'Interior a adelantar la firma del nuevo convenio de financiación de los Mossos.

El nuevo convenio, según avanzó Saura, podrá cerrarse en dos meses, y desde la Generalitat se ha instado al Ministerio de Interior para que contribuya con partidas económicas a reducir el déficit actual de efectivos del cuerpo policial.

El mismo Rubalcaba reconoció que la plantilla de los Mossos no es suficiente y que los policías catalanes «hacen un sobreesfuerzo» en horas extraordinarias. Así, aseguró que el Gobierno revisará los módulos de financiación posibles para hacer frente a las necesidades.

El resultado de la Junta de Seguretat no fue del agrado de la oposición. El diputado de CiU en el Parlament Francesc Homs afirmó que el ministro de Interior ha «tomado el pelo» al Govern, al salir de la reunión sin prometer más policías ni guardias civiles y, además, encargando «deberes» a los Mossos d'Esquadra.

Para Homs, las nuevas funciones de los Mossos en la aduana suponen «ir a hacer el trabajo que le toca a la Policía». En declaraciones a Europa Press, Homs recordó que Saura lleva tiempo «denunciando que faltan efectivos y que es culpa del Estado porque no cubre vacantes», por lo que consideró «irresponsable» y «gravísimo» que sigan faltando policías y guardias civiles en Cataluña.

BARCELONA.- El conseller d'Interior, Joan Saura, manifestó ayer que Cataluña «es un país razonablemente seguro». Lo hizo respaldado por los datos recogidos por los Mossos d'Esquadra sobre los índices de criminalidad en Cataluña durante 2006, que apuntan que aunque creció el número de delitos y faltas un 1,21% en el territorio donde están desplegados, las conductas más graves han disminuido un 0,15%, siendo las faltas lo que más se ha incrementado durante el año.

Los datos, que también incluyen la actividad desplegada por las 145 policías locales que desarrollan su trabajo en Cataluña, fueron valorados tanto por Saura como por el ministro de Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, como una muestra de «estancamiento» de la criminalidad.

«Tenemos más policía en la calle, y más medios, y también más coordinación», señaló el conseller d'Interior.

Saura señaló que los datos son muy similares a los que presenta el conjunto español, y mientras Rubalcaba apuntaba que España es más segura que Alemania, Suecia y Reino Unido, el conseller d'Interior justificó la sensación de inseguridad que atenaza alos ciudadanos. «Determinados tipos de nueva violencia, algunos con una gran brutalidad, dan una más amplia sensación de inseguridad», explicó.

Pero la sensación sigue allí, agazapada en las encuestas, y Rubalcaba también la quiere combatir: «Tenemos que trabajar para que la sensación objetiva y subjetiva varíe», advirtió.

Fue también el ministro de Interior el que rehuyó la impresión de estar cayendo en la autocomplacencia a la vista de los resultados sobre la criminalidad.

El ministro de Interior añadió que España es uno de los países más seguros de la Unión Europea, pero que «una cosa es lo que uno sabe que pasa y otra si lo vive como un problema».

En cualquier caso, Alfredo Pérez Rubalcaba afirmó que la sensación de inseguridad «está bajando» y que es menor «entre los jóvenes».