En las cuestiones previas del caso, celebradas ayer, el fiscal Juan Pavía rebatió los argumentos de las defensas para sobreseer el caso por ausencia de perjudicados y de perjuicio para el BBVA después de que la entidad prefiriera no reclamar ninguna responsabilidad civil.

Los 37.427 millones de pesetas (unos 225 millones de euros) de las cuentas secretas se incluyeron como «beneficios extraordinarios» en la contabilidad de 2000 después de que Ybarra revelase su existencia en sociedades de Liechtenstein y la Isla de Jersey al Banco de España.

Los abogados de las defensas argumentaron que el BBVA pagó más de 13.000 millones de pesetas (78,13 millones de euros) en concepto de Impuesto de Sucesiones para regularizar su situación fiscal. Sin embargo, según el fiscal, con esta operación se «dificultó» la labor de control del Banco de España y no se dio la información «en el momento oportuno» a los clientes, cuentacorrientistas y depositantes de la entidad. El fiscal dejó constancia de que éstos deberían haber tenido la posibilidad de «opinar» sobre los modos de manejar el dinero del banco, informa Efe. El fiscal puso como ejemplo que no se sometió «a la censura» de los clientes «algo fuera del objeto social» del BBVA.

Las defensas destacaron que los acusados fueron absueltos del delito de apropiación indebida por el Tribunal Supremo en relación con esos planes de pensiones. La Fiscalía pidió dos años de cárcel para Ybarra y tres para el ex consejero delegado Pedro Luis Uriarte por un delito continuado de falseamiento de cuentas anuales. Solicitó tres años para Gervasio Collar y Domingo Ampuero por el mismo delito, y dos años y 10 meses para el ex director financiero Luis Bastida.

El juez Vázquez Honrubia habrá de decidir en las próximas semanas si estima las demandas de las defensas o dictamina la fecha para celebrar el juicio oral.