«No me serviré de mi cargo para hacer negocios. Yo no deseo el palco del Real Madrid para 'pescar' algo. Lo que quieren los socios es un presidente y una junta directiva que no utilicen el nombre del Real Madrid para enriquecerse a su costa». Los principios éticos con los que Ramón Calderón se fue adentrando en la campaña electoral a la presidencia del club blanco han sido puestos en entredicho y le han estallado en las manos. La polémica se acaba de desatar en Rumanía. Cerdos, piensos, mataderos, tráfico de influencias y una sociedad limitada participada por dos firmas en las que aparecen los nombres de la mujer del mandatario blanco, María Teresa Galán Otamendi, y de su cuñado, Javier Galán Otamendi.
Según afirma la revista rumana Piata Agricola, Ramón Calderón propuso un jugoso acuerdo con el Gobierno de aquel país para establecer un negocio particular de cría y explotación de cerdos. Los cerdos galácticos fue el título del reportaje de la revista oficial del Ministerio de Agricultura rumano. Siguiendo estas informaciones, la Cadena Cope, en su programa El tirachinas, informó el pasado martes de que el intento de negocio surgió justo 20 días después de que el Real Madrid conociera que el Steaua de Bucarest iba a ser uno de sus rivales en la primera fase de la Liga de Campeones. La sociedad se registró en Madrid con el nombre de Rupork Producción (participada por otras dos: Galagart Inversiones S.L. -en ésta es en la que aparecen como administradores la mujer y el cuñado de Calderón- y Merebla de Inversiones y Desarrollos Inmobiliarios S.L., administrada por Javier Revuelta y Andrés Tejero, ex directivos de Telefónica) el 23 de septiembre, menos de un mes antes del duelo en casa del Steaua, el pasado 17 de octubre. El objetivo social de esta compañía es «la dirección, administración, gestión y producción de explotaciones ganaderas».
Según estas informaciones, Ramón Calderón organizó un encuentro con diversas autoridades del país, entre los que se encontraban el ministro de Agricultura, Gheorghe Flutur, que recientemente abandonó su cargo por razones políticas.
La revista incluso se llegaba a felicitar por la noticia, ya que según las informaciones a las que había tenido acceso, y citando al Ministerio de Agricultura (faltaría más tratándose de la revista oficial), «se llegarían a crear 2.000 puestos de trabajo, 500 de ellos para agricultores locales». Según los datos facilitados tanto por la revista rumana como por la emisora de radio española, el volumen de negocio en una zona sur de Rumanía sería de 100 millones de euros, pese a que el capital social inicial era de 6.000 euros, según se puede comprobar en el Registro Mercantil. En el proyecto se contemplaba levantar una fábrica de piensos para animales y un moderno matadero.
El encuentro con el ministro de Agricultura se produjo poco después de que Calderón confraternizase con el presidente del Steaua de Bucarest, Gigi Becali, durante una comida de hermandad con el club rumano. El encuentro se produjo en el selecto restaurante McMoni's. En ese lugar, el directivo de Steaua le ofreció a Calderón la posibilidad de fichar a su jugador Radoi. A pesar de que inicialmente Calderón no se pronunció, finalmente no hubo acuerdo.
Ni que decir tiene que la difusión de este asunto no ha hecho gracia al presidente blanco. No quiere comentar nada sobre este asunto, pero algunos de sus compañeros de junta, presentes ayer en Múnich, mostraron su sorpresa por las noticias llegadas desde Madrid y Bucarest.
No es el primer escollo en el que se ve envuelto el actual mandatario blanco. Desde que accedió a la presidencia su travesía ha sido bastante accidentada. Hasta el pasado mes, no se resolvió la polémica judicial del voto por correo, que
él mismo denunció en su día y que se convirtió finalmente en un extraño pulso con otro de los candidatos, el empresario Juan Miguel Villar Mir.
En el proceloso camino hasta los juzgados, Calderón sufrió numerosos problemas por su incontiencia verbal, como el que protagonizó en una reunión con estudiantes del Centro Universitario Villanueva, a quienes les ofreció un repaso nada feliz del vestuario del Real Madrid. Su desliz le obligó a pedir perdón a su plantilla. Algunos de los jugadores le echaron en cara su comportamiento y le exigieron que no volviera a hablar en público de ellos. La irregular marcha del equipo añadió más presión al presidente, que decidió apartarse de los micrófonos.
«La reunión con el ministro rumano fue casual»
MADRID.-
Ramón Calderón no quiso hacer ayer declaraciones, pero mostró a sus allegados su consternación por la polémica generada debido a su entrevista con el ministro de Agricultura rumano, Gheorghe Flutur. Según fuentes próximas al dirigente blanco, «Calderón asistió al encuentro de forma casual, por encontrarse en Bucarest con el Madrid, con la intención de acompañar a su cuñado, Javier Galán», administrador de la empresa Rupork Producción S.L.
Javier Galán llevaba más de un año, desde antes de que Calderón accediera a la presidencia del club, viajando a Rumanía, donde es un empresario acreditado. Su familia lleva unos 40 años en el negocio porcino y regenta la explotación de la granja Dos Hermanas, en Navarra. Estos antecedentes deberían servir, en opinión de Calderón, para dejar claro que no se creó una empresa ficticia con el único objetivo de hacer un rápido y buen negocio, dada su influencia como presidente. En Bucarest, toda la expedición blanca fue agasajada y Calderón, tratado como si fuera un alto dirigente de Estado.
Lo que no tiene ningún sentido, en opinión del dirigente madridista, es que se vincule la fecha de la constitución de la sociedad, el 23 de septiembre de 2005, con la fecha del sorteo de la Champions, 20 días antes, en la que el Madrid supo que debía enfrentarse al Steaua y, por tanto, desplazarse a Bucarest. «Es puramente anedóctico», manifestó una fuente próxima al presidente, que, según insistió, desconocía la fecha de la creación de Rupork Producción.
Asesor jurídico.
Desde la nueva empresa niegan, a su vez, que Calderón utilizará su posición de presidente. Admiten que, en su momento, aceptó actuar como asesor jurídico, dado que, además de su cuñado, entre los administradores se encuentra su mujer, María Teresa Galán. «Si se produjo una aproximación de Calderón al ministro fue inocente, ya que no era en absoluto necesaria, porque no hay nada que conseguir del Gobierno rumano, sino que es éste quien quiere a toda costa que se produzcan inversiones en el país. Te reciben con los brazos abiertos y no es necesario que seas presidente del Madrid. Es más, muy posiblemente es mucho más influyente en Rumanía su propio cuñado que el propio Calderón», manifestó una de las personas vinculada a la sociedad que prefirió permanecer en el anonimato.
La creación de unos 2000 puestos de trabajo es una de las razones por las que el Ministerio rumano dio gran publicidad a un encuentro que Calderón no ha podido negar. Sin embargo, la sociedad española necesitaba encontrar inversores para un desembolso muy importante, de unos 100 millones de euros, y cuyo retorno, por tratarse de un negocio ganadero, se produciría a largo plazo. La inversión, además, depende de unas subvenciones de la Comunidad Europea, por lo que en estos momentos es difícil que acabe por materializarse.
«Cerdos galácticos»
«El presidente del Madrid ha tenido en Rumanía una doble misión», arranca el reportaje titulado: «Fábrica de cerdos galácticos». Lo publicó la revista 'Piata Agricola', editada por el Ministerio rumano de Agricultura. La publicación informa de una reunión el pasado 17 de octubre, coincidiendo con el Steaua-Madrid, entre el ministro del ramo, Gheor-ghe Flutur, y Ramón Calderón, que, según la revista, «representó a un grupo de inversores españoles, y éstos han anunciado su intención de crear en Rumanía un sistema de granjas de cerdos, con una inversión de 100 millones de euros». En otro despiece, se insiste en la figura del presidente blanco como «abogado representante del Grupo Rupork». La publicación se equivoca en el colofón de la noticia al señalar que «en febrero de 2006, Ramón sustituyó al ex presidente del club galáctico Florentino Pérez». Calderón controla desde julio la entidad.
DECLARACION DE PRINCIPIOS
Durante la campaña electoral y después de ser proclamado presidente del Real Madrid (2 de julio de 2006), Calderón siempre advirtió de que nunca utilizaría el club para negocios particulares.
«En cinco años como directivo no he hecho un solo negocio. Ni mis directivos ni yo en el futuro los haremos». 22-6-2006. Cadena Cope.
«Voy a ser presidente del Real Madrid y no tengo yates ni soy millonario. Soy abogado y vivo de mi profesión». 26-6-2006. Onda Cero.
«Ahora he llegado yo, un socio más, y el palco es de los socios, y no de los negocios». 21-9-2006. Onda Cero.
«Me he enfrentado a la oligarquía financiera y les he quitado su juguete. Están desconcertados. Pensaban que la presidencia se podía comprar». 26-10-2006.
