El jefe del Ejecutivo navarro indicó que su Gabinete «lleva ya tiempo» planteándose la «necesidad imprescindible» de convocar un acto de estas características, especialmente tras analizar las políticas «muy poco razonables del Gobierno de España y de su presidente». Como ejemplos, citó «la lealtad institucional» que Zapatero le debe y que, a su juicio, no respeta, el «estatus jurídico-político de Navarra», que ve peligrar, y la «nula» información que le transmite «de temas que están en boca de todos». Especialmente grave fue, según su parecer, la ausencia de réplica a la última propuesta de Batasuna, que Arnaldo Otegi concretó en la creación de una autonomía que comprenda a Vizcaya, Guipúzcoa, Alava y Navarra.

Y como ejemplo del vacío al que le relegan las instituciones del Gobierno central, Sanz aseguró que «no habrá ninguna presencia ministerial en la celebración del 25º aniversario del Amejoramiento del Fuero de Navarra», nombre del Estatuto de Autonomía foral, que se celebra hoy. Una ley que nació «con carácter de pacto» entre Navarra y el Estado y que celebra un cuarto de siglo de vida «con una parte no presente».

Por todo ello, Sanz pidió «a toda la sociedad navarra» que secunde una marcha que tendrá lugar el próximo sábado 17 de marzo, a las 17.00 horas. Una reivindicación que debe ser «radicalmente democrática», por lo que pidió que los asistentes se inhiban de mostrar «símbolos no constitucionales».