El presidente del Gobierno español, José Luis Rodriguez Zapatero, reconoció que el encuentro fue breve, apenas 15 minutos, y que además hablaron de otras cuestiones de la Unión Europea, como la declaración de Berlín y el futuro de la Carta Magna. No lo detalló el presidente, pero según explicaron fuentes diplomáticas españolas, más que una entrevista preparada. Pareció un encuentro casual, ya que a su entrada a la reunión del Consejo Europeo, Rodríguez Zapatero se topó con la canciller alemana, Angela Merkel, y ésta le pidió que subiera a la oficina de la presidencia donde estuvieron charlando por espacio de un cuarto de hora.

Si fue casualidad, como dice la delegación española o si la canciller quiso llamar al orden a Zapatero por la actuación del Gobierno desde el lanzamiento de la OPA del gigante eléctrico alemán, E.ON, sobre Endesa, no lo sabemos ya que la delegación alemana rehusó comentar ningún aspecto de la reunión, ni de su contenido.

«Ha sido un encuentro breve», reconocía Rodríguez Zapatero, «en el que hemos llegado a una conclusión, que por otra parte, es bastante lógica, y es que en manos de los accionistas y de los titulares de las acciones en los porcentajes que cada uno tiene, está el futuro de esta empresa (en referencia a la eléctrica española)». «Es una evidencia», añadía durante la rueda de prensa a término del consejo, «que queremos subrayar como Gobiernos europeos y Gobiernos amigos que somos el gobierno alemán y el gobierno español».

De hecho, no parece que vaya a ser la última ocasión en la que se vean ya que no descartó volver a hacerlo en el futuro. «Hemos hablado y volveremos a hacerlo si es necesario en más ocasiones».

Aunque a Zapatero se le olvidó comentarlo, el presidente español, también trató el tema con su homólogo italiano, Romano Prodi, el último en llegar al reparto del pastel, tras la entrada de la eléctrica italiana Enel en la pugna por hacerse con Endesa. «En Ibiza no, pero ayer sí», aseguraba Prodi en referencia a la cumbre hispanoitaliana celebrada en la isla balear el pasado mes, cerrando así las especulaciones de que ambos gobiernos pactaron la entrada de la italiana en la eléctrica española. «También hablé de ello con Merkel» concluyó. La última vez que Zapatero y Merkel se reunieron para hablar en serio de la OPA fue el pasado septiembre en la cumbre bilateral que celebraron ambos países en Meesburg, Alemania. La situación era bien diferente entonces, y el presidente español llegó a calificar las relaciones bilaterales como «casi idílicas» insistiendo, además, en que no se vieron afectadas por la evolución de la OPA alemana sobre Endesa. En aquel momento, ambos se mostraron convencidos de que la solución lograría satisfacer los intereses de todas partes, algo que ahora parece impensable.