COTE VILLAR
Es un bazar de 2.800 metros cuadrados de superficie en el que todas las piezas tienen «nombres y apellidos». La vigesimoctava edición de la Feria de Arte, Antigüedades y Diseños originales del siglo XX (Artemanía) traslada estos días al Palacio de Congresos de Madrid su aroma de elegante decadencia. En ella, medio centenar de galeristas ofrecen al público lo mejor de su catálogo. Una colección de 5.000 piezas cuyos precios pueden llegar al millón de euros.
El precio, aparentemente desorbitado, se justifica por la alta cotización de las piezas más actuales. Este certamen se diferencia de otros, precisamente, en que abre un hueco al diseño del siglo XX. Son muebles y artes decorativas firmados por autores reconocidos del pasado siglo como Mies van der Rohe, Alvar Aalto, Le Corbusier o Clarice Cliff. Como ejemplo, un enorme cuadro de Luis Feito pintado en París en 1960 se deja querer por apenas 180.000 euros.
La mayor parte de las piezas suma a su valor económico el sentimental o incluso el documental. Ocurre en el caso del troumadam, una especie de billar femenino del siglo XIX ahora prácticamente inexistente; también en el del perchero inglés de 1820 que guarda un espacio para los sombreros de copa; la papelera italiana de finales del XVII salpicada de compartimentos secretos; las esculturas de bronce pertenecientes a la dinastía Shang del 1700 antes de Cristo; el Júpiter del siglo II, escuela romana, trasplantado del Imperio a la feria; los tapasexos del arte africano, precursor de tantas cosas, o la pieza de marfil que, a modo de rallador, servía para pulverizar el tabaco y convertirlo en el famoso rapé que entusiasmaba a las clases altas del siglo XVIII.
Descubierta a 20 metros de profundidad, en Nigeria, la cabeza de una figura africana que en otro tiempo fue de cuerpo entero es el orgullo de Raquel Montagut. Tras la prueba de termoluminiscencia se determinó la edad de la escultura: 2.200 años. Es sólo una de las piezas de valor incalculable que los galeristas de Artemanía, tanto nacionales como internacionales, brindan al público que quiera (y pueda) comprarlas.
Entrar en la feria tiene un precio de seis euros, que incluye la consumición de una bebida mientras se recorren las tres plantas del certamen.
Artemanía. Hasta el 18 de marzo en el Palacio de Congresos (Castellana, 99). Precio, 6 euros (con consumición).
|