Es curioso que para reverenciar a un santo tan tranquilo y recatado como lo fue San Antonio de Padua se eligiera un lugar de nombre tan bravío como el monte en cuya ladera se alza este templete.
Situado al oeste de Robledo de Chavela y pegado a la carretera de Fresnedillas, Montebravo, que así se llama, no deja de tener la paz que se presupone para un santo capaz de ajuntar los matrimonios más impensables. Como tan virgiliano ambiente con el ruido de los camiones que suben la cuesta del Robledillo.
Aunque la manera más rápida de alcanzar la ermita es por la citada carretera, no es ni con mucho la mejor forma de hacerlo. Más recomendable resulta la ruta de la Huerta de Arriba, que unida al regreso por mitad de la pinada, a través de un camino helicoidal, que no circular, aporta originalidad a nuestro recorrido de hoy.
El Ayuntamiento de Robledo es el punto de partida. Desde su puerta, seguir la calle de Piedita a la izquierda. Cruzar el espacio situado en el lateral del Consistorio y seguir por la calle de Mayoral. En su fin girar a la derecha por la calle Traspalacio y seguirla 200 metros. Luego girar a la derecha por la calle de Los Mesones que, como un milagro, deviene en paseo de San Antonio de Padua.
Ancha, despejada y en ligera cuesta arriba, la vía nos saca del pueblo por su lado oeste. Aquí hay una rotonda en cuya parte alta se localiza el detallado panel que da la salida al recorrido.
El camino emprende la subida por una pista descarnada. En la tercera revuelta se gira hacia el norte, encaminándose entre amplias fincas, a la izquierda, y el cerrado metálico de la finca Las Aleguillas hacia una encrucijada de caminos donde ha florecido un bosquete de carteles.
Uno señala que estamos en el cerro Robledillo, y que es propiedad del Ayuntamiento. Otro que la zona esta vedada de caza. Un tercero prohibe el paso de vehículos, al ser área cinegética controlada. A la derecha, en la entrada de la finca de Las Aleguillas, se advierte que está prohibido el paso, que es una propiedad privada y que está vigilada.
Aturdido por tanta información, sigue el caminante en línea recta, ahora sobre gravilla, hasta el final de la cuesta. Se continúa ahora horizontal, aunque guardando el rumbo.
Un poco más adelante del fin de la pendiente, aparece un sorprendente pino. El añoso vegetal llama la atención por la forma de su tronco, decidido a acostarse en el suelo, en vez de trepar hacia lo alto, produciendo la sensación de encontrarse ante un imposible bonsái gigante.
Casi allí mismo se encuentra la ermita de San Antonio, situada en un altozano sobre la carretera de Fresnedillas.
El regreso lo haremos por el mismo camino, hasta la encrucijada de los carteles. Aquí hay que desviarse a la derecha, para penetrar en el cerro Robledillo, al que se accede tras dejar atrás una barrera que impide el paso de vehículos.
Es un tramo cuesta arriba que desemboca en la parte frontal del cerro, desde donde se obtienen estupendas perspectivas aéreas de Robledo de Chavela y su entorno. La pista penetra a continuación en el bosque de pino negral, salpicado por encinas y enebros.
Siempre por la pista principal, el camino da un par de revueltas y parece dispuesto a volver a la ermita de San Antonio. En el último momento, gira a la derecha y continúa la bajada, para pasar, eso sí, por las proximidades de la carretera de Fresnedillas.
Deja a la derecha un depósito de agua y, siempre por el fondo del pinar, retorna rumbo sur tras un par de cerradas curvas. La pista principal, que es la que hay que seguir sin hacer caso a ningún desvío, termina en un área recreativa, que es la zona de transición entre los últimos pinos y las primeras casas de Robledo ya delante nuestro.
ROBLEDO DE CHAVELA
Pistas. En el Ayuntamiento de Robledo han editado un pequeño librito que recoge ésta y otras rutas por este término municipal. Información: Ayuntamiento de Robledo. Tel.: 918 999 084 y www.espaciorobledo.com.
Comer: Restaurante La Almenara.
(Tel: 918 998 283). Dormir: El Rincón de Traspalacio. (Tel.: 918 981 530). Ambos en Robledo.
BOSQUE CERRADO
Negrales. El bosque de pino negral es la parte más interesante de esta excursión. Esta especie conífera es la principal de un ecosistema donde también se localizan encinas y enebros. Jaras y plantas medicinales componen la parte más importante del sotobosque. Entre la fauna destacan ardillas y aves como carbonero, herrerillo y verderón.
CENTRO DE TRADICION
Ruta señalizada. Marcada por el Ayuntamiento de Robledo de Chavela, el Camino de San Antonio es una excursión que carece de excesivas dificultades. Tampoco resulta dura, excepto los primeros repechos. Con una longitud de 5,5 kilómetros, puede realizarse entre una hora y media y dos horas. Gran parte de su recorrido discurre por un pinar.
