DANAE BORONAT
TARRAGONA.-
La victoria ante el hasta ayer líder de Primera, el Sevilla, da alas al Nàstic, que ve como los tres puntos reducen la distancia con la permanencia a tan sólo siete. La afición tiene derecho a soñar y el entrenador grana, Paco Flores, así lo reconocía ayer, exultante tras el encuentro: «Los sueños son ingobernables, tenemos ilusión y vamos a seguir peleando». Eso sí, advirtió que el trabajo todavía no se ha acabado. «Este resultado no va a cambiar el mensaje. El equipo está trabajando muy bien y por eso se están dando los resultados. Esto es importantísimo porque refrenda el trabajo semanal del entrenador y de los jugadores, y te hace tener más fe en lo que haces», reiteró el entrenador.
Ante la euforia que se pueda despertar en Tarragona tras tres partidos consecutivos sin perder, hecho inédito en la temporada, Flores prefirió mostrarse cauto: «Nuestro objetivo es intentar conseguir salvar el descenso. Está lejos, pero trabajamos para que las distancias se vayan reduciendo. Soy una persona que me dedico a frenar la euforia así que no tengo ningún problema».
Fortaleza física
Una vez más, el barcelonés insistió en su discurso de halagos hacia sus hombres, de los que quedó más que satisfecho: «El equipo pelea, trabaja y, aunque el rival haya podido ser superior, lo importante es el resultado final y la imagen que ha dado. Hemos podido meter muchos más goles al final del partido y eso demuestra que el grupo, físicamente, está extraordinario».
El Nàstic nunca antes había logrado dos triunfos consecutivos, ni había dado tan buena imagen ante equipos de la calidad del Valencia o el Sevilla. Los motivos de este cambio radical, según Flores, son varios: «Por encima de todo, han cambiado los resultados.Otro detalle importante es que cada vez se cometen menos errores individuales y también el porcentaje de acierto de los contrarios, que antes era extraordinario, ha bajado. Ahora nos generan oportunidades, pero no se transforman en gol. La fortuna es imprescindible en cualquier equipo».
El conjunto tarraconense tendrá el domingo una auténtica prueba de fuego en su visita al Santiago Bernabéu. El técnico grana, no obstante, todavía no quiere pensar en ello, sino saborear el gran triunfo ante el Sevilla. «Vamos a disfrutar de esta victoria, es importantísima. Hemos vencido a todo un líder, y eso es mucho mérito. Los jugadores merecen el reconocimiento de todos», sentenció Paco Flores.
La buena racha de las dos últimas semanas también hace que la plantilla grana afronte la recta final del campeonato con más optimismo que antaño. «Tenemos que ganar siete partidos, aún hay tiempo para conseguirlo. La gente ve que estamos dando la cara y lo haremos hasta el final, aunque lo más importante es ir poco a poco», destacó David García.
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