El Mundial de Fórmula 1 arrancará el próximo domingo en el circuito de Melbourne sin el que ha sido el referente en los últimos 15 años, Michael Schumacher, y con el vigente campeón, Fernando Alonso, en una nueva escudería. Tras los dos títulos consecutivos ganados en Renault, el español comienza una nueva era en un equipo poderoso pero huérfano de resultados. McLaren aguarda al influjo del piloto asturiano para volver a conquistar un Mundial que no alcanzan desde 1999. El rival, de nuevo, será Ferrari, donde Felipe Massa y Kimi Raikkonen se disputarán el liderato legado por Schumacher. Los resultados de la pretemporada dan ventaja a la escudería italiana por delante de McLaren, donde su mejor valor será el talento y la ambición de Fernando Alonso.
MADRID.- La variante Alonso. Así denomina Ron Dennis al mayor valor de McLaren en 2007. El jefe absoluto del nuevo equipo del piloto español repasaba anoche en el avión camino de Australia un enorme dossier de la pretemporada. Gráficos de evolución, velocidades comparadas, reseñas de aerodinámica... Datos, cifras, infinitos detalles técnicos que resumen el estado actual del MP4-22, el monoplaza con el que el vigente campeón comenzará el próximo fin de semana la 57 edición del Mundial de Fórmula 1.
Una temporada abierta de par en par tras la retirada de Michael Schumacher. Los dos títulos consecutivos del asturiano y la ausencia del heptacampeón serían argumentos poderosos para cargar el favoritismo sobre el 1 del español, pero su mudanza a McLaren rebaja la cotización de las apuestas que se centran en él. Llega a una institución nueva, de diamantes, pero hambrienta y con urgencias. Es el mayor conjunto de Fórmula 1 (en presupuesto, empleados o impacto mundial de negocio) junto a Ferrari, aunque su sala de trofeos no recibe un Mundial desde 1999, cuando lo ganaron por segunda vez con Mika Hakkinen. «El equipo quedó varado en aquella época», cuentan desde dentro, «Fernando, en pocos meses, ha sacudido las estructuras». Es La variante Alonso. En Woking, la sede de la escudería, están sorprendidos por la rápida implicación del español, por sus ganas de poner en marcha un proyecto que le pueda hacer pasar a la historia como una leyenda del automovilismo. «Los grandes campeones tienen más de dos mundiales. Quiero ser uno de ellos», ha dicho. Pretende crear en McLaren una máquina engrasada al ejemplo de la Ferrari de Michael Schumacher. Jerarquía piramidal, con él arriba. «Están siendo muy permeables con las indicaciones del piloto», explican en el entorno del campeón.
Los fabulosos recursos que maneja Ron Dennis, provenientes de la multinacional McLaren, que recoge variados beneficios (desde la hostelería de lujo a la electrónica de la MotoGP), permiten a Fernando Alonso observar el futuro con optimismo, pero sin prisas. Los resultados de la pretemporada reflejan una evolución positiva de McLaren, bien conjugada con los Bridgestone, su nueva marca de neumáticos. ¿Suficiente para ganar? «Fernando nunca está contento con el coche, siempre quiere más», susurran cerca de un bicampeón muy prudente con los espejismos de la pretemporada.
Ventaja.
Los entrenamientos demuestran un dominio de McLaren en los tests europeos y superioridad de Ferrari en las pruebas de Bahrein, en climas más templados, parecidos a los que se van a dar en las tres primeras carreras del curso (Australia, Malasia y Bahrein). En los días que ambos equipos han compartido pista, los italianos han marcado los mejores tiempos en ocho ocasiones, por cinco de los ingleses. A pesar de que por momentos los entrenamientos parecen auténticas carreras, por el número de escuderías participantes, cada coche busca un objetivo distinto en ese puñado de vueltas que dan entre cambios de alerones o mínimos retoques. A veces, el fin es el golpe publicitario, siempre agradecido para los patrocinadores.
Este invierno ha dado luz verde a BMW, equipo que con el rapidísimo Kubica pretende avanzar, y ha puesto una muesca de preocupación en Renault. El R27 será efectivo, pero Fisichella y Kubica son una incógnita. La variante Alonso hace sonreír a Ron Dennis. Sabe que las décimas de segundo de ventaja que la técnica proporciona a Ferrari pueden ser compensadas por la forma de conducir de su reluciente fichaje. «Si el coche resiste, estaremos arriba», aseguran en Woking.
«Pasarán grandes cosas en McLaren si escuchan a Alonso», dice el ex campeón del mundo, Jacques Villeneuve. El reto inicial será frenar los réditos que obtenga Ferrari en el inicio del campeonato, mientras el McLaren es afilado por el ovetense en la pista y sus ingenieros en el box para llegar a las pruebas europeas en la pugna. Y que La variante Alonso haga el resto.