La Fiscalía solicita 36 años de prisión para Alvaro I.G., Nanysex, acusado de haber abusado sexualmente de varios menores de edad aprovechando su condición de canguro y de grabar las escenas y difundirlas por Internet, hechos ocurridos entre el año 2002 y el 2004. El escrito de conclusiones provisionales del representante del Ministerio Fiscal, considera que en 2003 el acusado masturbó e, incluso, introdujo su pene en la boca de dos menores a los que cuidaba.
Los niños vivían en Collado Villalba y habían nacido en marzo de 2001 y en septiembre de 2002, respectivamente. Todas estas acciones fueron grabadas en vídeo por el propio acusado, según Europa Press.
Además, Alvaro I.G., que compartía piso en Collado Villalba con los padres de un menor, nacido en noviembre de 2001, aprovechó de nuevo la confianza que los progenitores depositaron en el acusado para cuidar a su hijo y, junto con Eduardo S.M., penetró analmente al niño, entre otros actos sexuales. Estos sucesos ocurrieron en fechas no determinadas entre noviembre de 2003 y febrero de 2004 y fueron grabadas y difundidas por Internet.
Igualmente, entre abril y mayo de 2004, Alvaro I.G., que en aquellas fechas vivía con una madre y su hijo menor de edad, grabó «los tocamientos obscenos» que le hizo a este niño, nacido en febrero de 2002.
Por su parte, el otro encausado, José G.C., abusó sexualmente en el 2002 de dos menores, nacidos en abril y noviembre de 1996, respectivamente, «sin que conste el empleo de violencia o intimidación». En este caso, también se aprovechó de la confianza que transmitía a los padres cuando dejaban a sus hijos a su cuidado.
En los vídeos en los que José G.C. grababa a estos dos menores, intervenía en diversas escenas el acusado Eduardo S.M., en las que «realizaba tocamientos» a los dos menores en la ducha. Estos vídeos también eran difundidos por Internet. Ante estos hechos, los dos menores presentan como secuelas «ansiedad, conductas de escape y dispersión, malestar e inquietud».
Mientras, el imputado Antonio O.M. está acusado de intercambiarse con los anteriores procesados imágenes y vídeos a través de Internet. En el registro que la Policía practicó en su casa, le fueron intervenidos distintos archivos de su ordenador que contenían pornografía infantil y que también difundía por la Red.
El escrito del fiscal señala que «al tiempo de los hechos, Alvaro I.G. presentaba una parafilia de tipo pedófilo en el contexto de un trastorno de personalidad probablemente antisocial, sin alteraciones sustanciales en las facultades mentales superiores, necesarias para comprender el valor y consecuencias de sus actos y dirigirlos libre y voluntariamente».
Sobre Eduardo S.M. el escrito recoge que «presentaba una parafilia de tipo pedófilo, sin alteraciones sustanciales en las facultades mentales superiores necesarias para comprender el valor y consecuencias de sus actos». De José G.C. dice que tiene «una parafilia de tipo pedófilo en el contexto de una personalidad con rasgos dependientes». El fiscal considera los hechos constitutivos delitos de abusos sexuales, pero no de violación o agresiones sexuales al no existir «violencia o intimidación». El fiscal pide 24 años para José, 13 y medio para Eduardo y 10 para Antonio.