Ni la casa real danesa se nos acerca en discreción y flema: ¡si se casa la hongkonesa con otro, y el ex va a la fiesta de despedida de soltero de ese otro sin que se le caigan lo cuernos, de vikingo...! Para mí que Marga, the queen, está todo el santo día diciendo: «Hongkonesa de las narices».

Y no me extraña nada. Soy yo, y ya me tienes liada con el móvil estampándoselo en el entrecejo -que ésta, encima, lo tiene amplio-, como si fuera, talmente, Naomi Campbell contra su personal assistant. Lástima que las autoridades públicas no entiendan lo que sufre una top model cuando está hasta el moño de barritas dietéticas sabor muesli. Ahora, a la pobre Naomi, como castigo, le obligan a pasar la mopa por todo un edificio de Nueva York, como si no tuviera bastante con una personal assistant sin seguro médico... La justicia, que es de traca.

En fin, que mi familia monoparental pende de un hilo. Mum recrimina que le dejara atada al container sito en la puerta de Purificación García la noche de la fiesta de MAGAZINE, que se le volaron las extensiones, las pestañas postizas y las uñas con el huracán que hemos sufrido, que porque dicen que se trata de un fenómeno meteorológico, pero yo juraría que el desinfle de Raquel Mosquera ha tenido mucho que ver... Yo ya le intenté explicar a mi progenitora que a una fiesta diseñada a imagen y semejanza de la legendaria cita que organizara en el Hotel Plaza Truman Capote, en la que todo y todos debían ir de blanco y negro, su rouge labial no pegaba absolutamente nada. Pero ella no entiende. Ella erre que erre.

Que digo yo, ¿qué tendrán estos familiares próximos a una estrella, -como mum y moi- para que se vistan como feriantes? Porque, sí, mucho rollo con el vestido de Pe y el glamour de Pe, fascinante anyway, pero ¿y ese padre? ¿Qué hacemos con él? Y el otro día, el progenitor de Paz Vega también me llevaba una corbata salmón con topitos... Un revés con la mano vuelta le daba yo....

Como a Carlota Casiraghi, ¿cómo se puede estar borracha como un piojo y dejar que te hagan fotos con el pelo sucio? Igualita que Camilín. ¿Pero este niño no se ha dado cuenta de la importancia de una higiene capilar después de vivir media vida con un padre, Camilo, con el cabello de nailon? Mira, es que me desespero... Pues resulta que este niño, que tenía pinta de ser un ñoño que lo flipas, ahora es la versión pija de Paquirrín -el Niki Lauda de Cantora-. Para mí que su tía, una barriguitas nonagenaria, le descubrió el lado oscuro de las tragaperras en el bingo.

Encima, Mum ya me tiene el cutis señalado como si fuera la madre de Belenchy Esteban, afilándose las uñas con el acetato del chándal... Aún no entiendo cómo los hijos de Julio Iglesias no se rebelan contra el estado de ñoñez impuesto por Miranda, qué pesada...

Invítame a tu fiesta en el correo electrónico

anaconda@elmundo.es