Los servicios jurídicos del Barcelona han pedido al Comité de Competición de la Federación Española de Fútbol que abra un expediente sancionador contra el delantero del Levante Salva Ballesta por declarar que le «merece más respeto una caca de perro» que el central azulgrana Oleguer Presas. Salva respondió de esta guisa cuando se le cuestionó el pasado mes de febrero sobre el artículo en el que el barcelonista cuestionaba el Estado de Derecho a partir del caso del etarra José Ignacio de Juana Chaos. El Comité estudiará el caso esta tarde.
Según confirmaron fuentes del Barcelona a este diario, la iniciativa de reclamar a la Federación que estudie las declaraciones de Salva y expediente al delantero parte «exclusivamente» del club, sin que Oleguer haya reclamado un apoyo explícito insitucional. Así lo corrobararon ayer a EL MUNDO fuentes del propio futbolista azulgrana: «Oleguer no ha movido ni solo un dedo para que sancionen a nadie. Él nunca hace caso a estas cosas y entiende que cada uno tiene el derecho a decir lo que quiera. Simplemente, le da igual lo que puedan decir sobre él. Es así».
En el Barcelona afirman que no están dispuestos a que las palabras de Salva queden sin sanción, sobre todo si pueden originar comportamientos violentos en los estadios. «Es un hecho muy grave», insistieron. «Por eso «el club ha decidido actuar».
La noche del 11 de febrero, en el programa Al Primer Toque de Onda Cero, a Salva Ballesta, que siempre se ha caracterizado por defender sus ideales españolistas y estar cerca de la derecha, le preguntaron sobre el artículo de Oleguer. Y pese a que en un primer momento el futbolista del Levante se lo pensó un par de segundos antes de responder, acabó por despreciar al central catalán. «Lo de Oleguer... yo creo que... [duda] uf... No voy a entrar en ningún tipo de comentario. [Se lo vuelve a pensar] Le tengo más respeto a una caca de perro».
Tanto Salva Ballesta como el Levante tienen de plazo hasta las 18.00 horas de hoy para presentar las pertinentes alegaciones. Según avanzó ayer a Europa Press el consejero y responsable de los servicios jurídicos del Levante, Jorge Lucas, la defensa se basará en que las declaraciones de Salva «no son materia deportiva, sino una opinión sobre otra opinión política», por lo que el Comité de Competición «no podría así sancionar» al jugador.
Todo parte del polémico artículo escrito por Oleguer -conocido por su activismo político y por defender el ideario antisistema catalán- publicado la primera semana de febrero en el semanario catalán Directa, y reproducido por el diario vasco Berria. En su escrito, titulado La bona fe (La buena fe), el defensa del Barcelona comparaba la situación por la que entonces atravesaba el etarra De Juana Chaos con las concesiones hechas en su día al ex guardia civil Rodríguez Galindo o a Rafael Vera, ex secretario de Estado, excarcelados por motivos de salud. El artículo fue escrito antes de que De Juana abandonara la huelga de hambre tras serle concedida la prisión atenuada.
Posteriormente, el presidente del Barcelona, Joan Laporta, censuró que Oleguer hubiera utilizado las instalaciones del club para tratar el tema. Mientras, la empresa valenciana que equipaba al azulgrana, Kelme, decidía rescindir unilateralmente el contrato que le unía al futbolista. «La vinculación de Kelme con el jugador se basaba en criterios única y exclusivamente deportivos. Estas declaraciones han afectado negativamente a la marca. Hemos recibido cancelaciones de pedidos de las botas de fútbol que llevan el nombre de Oleguer», se excusó la firma.
El futbolista azulgrana, por cierto, aún no ha llegado a acuerdo alguno con ninguna marca deportiva, pese a que en su día se especuló con que la empresa catalana Munich podría hacerse cargo de su patrocinio.
Enfrentados por dos ideales políticos contrapuestos
Dicen que Salva Ballesta (Zaragoza, 1975) se despierta cada mañana escuchando el himno español. Trotamundos del fútbol patrio y ahora en las filas del Levante, no comenzó a interesarse profesionalmente por el mundo del balón hasta los 17 años. Sus intenciones, desde que llegó a la base aérea de Tablada (Sevilla) a los 11 años, eran otras. Quería ser militar, como su padre y su abuelo. Y concretamente piloto, su gran vocación frustrada. Se ha tenido que conformar con pilotar avionetas y coleccionar maquetas en su cuarto.
Salva nunca ha escondido su ideología, claramente ubicada en la derecha. Lleva en las botas la inscripción «Arriba España» y celebra los goles con un gesto castrense. «Nunca faltará esa celebración porque el ejército lo llevo en mi vida», dice con orgullo.
«Los españoles tenemos que defender a nuestro país y a nuestra bandera como hacen en todos los sitios», acostumbra a decir Salva cuando le cuestionan sobre la unidad de España.
Salva, incluso, ha concedido alguna entrevista al portal 'Infonacional.com', en la que ha afirmado que «hoy en día esta mal visto el sentirse español y el defender a tu país». «A España, servir hasta morir», declaró en este mismo portal.
Tal y como le ha ocurrido a Oleguer Presas, Salva Ballesta ha sufrido más de un altercado en ciertos campos de fútbol. Si al azulgrana le han abucheado en Mestalla por haber defendido los «países catalanes libres», Salva ha tenido problemas en San Mamés o en el Reyno de Navarra. En un partido ante el Athletic, se colgó una pancarta que decía: «Salva Ballesta, tiro en la nunca». En el campo de Osasuna, el ariete se encaró con los seguidores que le insultaban y les gritó: «Que viva España, hijos de...».
Oleguer Presas (Sabadell, 1980) se encuentra al otro lado del océano. Licenciado en Económicas y estudiante de Humanidades, nunca ha declarado públicamente ser independentista pese a que se ha posicionado siempre con los sectores más catalanistas. Izquierdista, simpatizante del movimiento antisistema y defensor de las selecciones catalanas, Oleguer no pierde ocasión para publicitar sus ideales.
Mañana mismo, el jugador presentará junto al también azulgrana Lilian Thuram un manifiesto de apoyo a la lengua catalana y a la 'Bressola', la red de escuelas laicas catalanas del sur de Francia.
