B. MONTAÑO
MADRID.-
La operadora ONO, que llegó al mercado en 1998, ha entrado en beneficios. Según los datos aportados ayer por su presidente, Eugenio Galdón, la compañía redujo un 91,7% sus pérdidas en 2006, hasta los 39 millones de euros, pero el último trimestre ya registró un resultado neto positivo de ocho millones. «Esperamos cerrar el ejercicio 2007 con un saldo positivo», vaticinó Galdón. Sin embargo, ONO redujo un 5,4% sus ingresos en 2006, hasta 1.633 millones, por la caída de la actividad de acceso indirecto (a través de la red de Telefónica), que la operadora no considera estratégica. El grupo redujo los costes operativos en 14%.
Durante 2006, tras la absorción de Auna, ONO se ha consolidado como el segundo operador integrado, sólo por detrás de Telefónica, su principal competidor. Según sus datos, ONO ya supera a Telefónica en clientes de triple play (telefonía fija, internet y televisión), al alcanzar los 561.000 abonados. Asismismo, cuenta con 1,06 millones de clientes de banda ancha y lanzará su propio servicio de telefonía móvil a finales de este año, con lo que plantará cara a Telefónica en todos los mercados.
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