Después del éxito relativo que tuvo el invento en La Romareda (1-2) y de los descalabros en Sevilla (2-1 contra 10), Liverpool (0-1 tras fallar múltiples ocasiones los ingleses) y ante el Real Madrid (3-3 con una enorme actuación de Valdés), el sistema que acuñó Cruyff volverá al baúl de los recuerdos de donde salió.

La ocasión bien lo merece: el Barcelona visita esta tarde (20.00 horas, PPV) al Recreativo de Huelva, equipo revelación de la temporada y uno de los pocos rivales de entidad que le quedan hasta fin de curso. Los de Rijkaard llegan exigidos por su irregular rendimiento en los últimos meses -desde la disputa del Mundial de Clubes en diciembre no ha vuelto a recordar al equipo intratable de las dos últimas campañas- y con una estadística que semana a semana se hace más preocupante: la última victoria lejos del Camp Nou que el Barça logró en el torneo doméstico se remonta al mes de noviembre, cuando doblegó por 1-4 al Mallorca.

Las reiteradas curas de humildad que ha recibido el Barça en las últimas semanas serán la mejor medicina para un equipo que parece encaramado al liderato por causalidad y que volverá a sus orígenes, con Zambrotta y Gio en los laterales y un pivote por delante de la defensa. En esta posición existe la duda de si Rijkaard apostará por Edmilson -olvidado en los últimos partidos por su mal momento de forma- o repetirá con Xavi, Iniesta y Deco en la medular. En ataque, el Barcelona volverá a alinear a su rutilante tridente, con Messi, Eto'o y Ronaldinho. El técnico holandés, sin embargo, admitió ayer mismo que su equipo atraviesa una situación delicada. «Hay malos momentos que hay que superar y estamos trabajando en eso», explicó. «Los jugadores que participaron en el Mundial han tenido las cosas bastante complicadas hasta ahora», añadió en referencia al flojo nivel físico de sus jugadores, aunque dejó un mensaje optimista. «Estamos muy motivados. Somos uno de los equipos que más pueden crecer», aseguró.

Vista la alineación azulgrana, su visita a Huelva será una fiesta para un equipo recién ascendido que mueve bien el balón y que, contra todo pronóstico, es séptimo a sólo dos puntos de la UEFA.

Marcelino cuenta para este partido con importantes bajas como serán Viqueira, Javi Guerrero y Cazorla. Sin embargo, podrá contar con Uche y Sinama Pongolle en la punta de ataque y volverá a tener en el internacional portugués Beto al líder de su defensa. El entrenador asturiano quiso dejar claro que los últimos resultados de su rival de esta noche no convierten al Recreativo en favorito. «Confío en que el Barcelona no tenga un buen día, pues si lo tiene, es un equipo prácticamente imparable», afirmó.

El ambiente que se respirará en el Nuevo Colombino promete ser para recordar: en la ciudad onubense hace un mes que no quedan localidades para ver al último campeón de Liga, a pesar de que las entradas tuvieron los precios más altos de la historia del club más antiguo de España.