El candidato de los socialistas navarros, Fernando Puras, advirtió ayer al presidente Miguel Sanz que no pactará con Unión del Pueblo Navarro (UPN) «el futuro» de la Comunidad Foral si no desconvoca la manifestación prevista para hoy por el Gobierno foral bajo el lema Fuero y libertad. Navarra no es negociable. La marcha, respaldada por el Partido Popular, pone de manifiesto la división política existente en Navarra.
Fernando Puras presentó ayer un documento titulado Compromiso con Navarra en el que promete que no propondrá la incorporación de Navarra al País Vasco y asegura que, en caso de que se plantee esta posibilidad, se opondrá a ella.
En contrapartida, dio un ultimátum a Sanz: «Si quiere apostar por construir el futuro de Navarra junto al PSN como garante de la convivencia, debe desconvocar la manifestación».
Rodeado por todos los candidatos autonómicos socialistas, Puras advirtió que, de celebrarse la marcha hoy a las 17.00 horas, el PSN entenderá que UPN «decide someterse a los intereses del PP y mantenerse en manos de la cofradía de la crispación».
«De Navarra debemos hablar en Navarra, a través de nuestras instituciones y en las urnas», consideró. Y con el compromiso socialista de «continuar la construcción de Navarra como comunidad foral, histórica, propia y diferenciada, integrada directamente en España, a la que ha de seguir contribuyendo a conformar».
Así, el eslogan socialista para las elecciones de mayo -Navarra, siempre- quiere subrayar que «el pueblo navarro sólo será políticamente lo que decidan democráticamente los navarros, conforme a la Constitución y a sus propias leyes».
Estas razones no convencieron al Gobierno foral. El consejero de Presidencia, Javier Caballero, hizo un llamamiento a la ciudadanía para que se sume a la manifestación. Ninguna fuerza política navarra ajena al Gobierno foral secundará la convocatoria, pero sí lo harán los principales dirigentes del PP, encabezados por su presidente, Mariano Rajoy.
Le acompañarán el secretario general, Angel Acebes; los portavoces en el Congreso y en el Senado, Eduardo Zaplana y Pío García-Escudero, respectivamente, y el portavoz en el Parlamento Europeo, Jaime Mayor Oreja.
También asistirán la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, y la presidenta del PP vasco, María San Gil.
Miguel Sanz; sus 11 consejeros; el presidente del Parlamento autonómico, Rafael Gurrea; el presidente de Convergencia de Demócratas de Navarra (CDN), Juan Cruz Alli, y la alcaldesa de Pamplona, Yolanda Barcina, abrirán la marcha sosteniendo una pancarta de 10 metros con el lema Fuero y libertad. Navarra no es negociable, que irá precedida de una bandera de Navarra sostenida por ciudadanos anónimos. En segunda fila se colocarán todos los políticos ajenos a la Comunidad Foral, para subrayar el carácter local de la reivindicación.
En su trayecto recorrerán varias calles del centro de Pamplona, para desembocar al pie de la Estatua de los Fueros, donde Sanz leerá el comunicado final.
Ésta no será la única marcha que recorrerá hoy las calles de Pamplona, ya que el sindicato abertzale LAB ha convocado otra manifestación a las 17.30 horas, sólo media hora después que la del Gobierno foral y con un recorrido que prácticamente envolverá a sus antagonistas políticos.
La razón de ser de este acto, que fue autorizado hace dos meses -aunque adquirió mayor significado tras anunciarse la iniciativa de UPN-, lo resume su lema: Contra la deslocalización; autodeterminazioak gure industria defenda dezagun [Defendamos nuestra industria con la autodeterminación].
Esta marcha discurrirá por otras calles del centro de la ciudad y terminará frente al Ayuntamiento. La cercanía en el espacio y en el tiempo de ambas convocatorias trasladará la tensión de la clase política a las calles de la capital.
El delegado del Gobierno en Navarra, Vicente Ripa, leyó ayer un comunicado en el que apeló, «más que nunca, al sentido común y al civismo» para «evitar cualquier incidencia no deseada» entre los ciudadanos que secunden una u otra manifestación.
Seguridad reforzada
PAMPLONA.- Más de 500 personas entre voluntarios, Policía Foral y Protección Civil trabajarán para que la concentración organizada por el Gobierno foral transcurra sin altercados.
Paralelamente, la Policía Nacional desplegará un amplio dispositivo para que se cumplan los términos en los que se solicitaron las dos manifestaciones, como son recorrido y lemas.
El delegado del Gobierno en Navarra, Vicente Ripa, admitió que la de hoy será «una jornada compleja» desde el punto de vista del orden público, debido a «las motivaciones ideológicas de quienes compartirán la vía pública». No obstante, apeló al comportamiento individual para que no haya «incidentes reseñables» y para que «quede plenamente evidenciada la madurez democrática de la sociedad navarra y española».
Por ello, «los funcionarios policiales van a estar particularmente vigilantes ante la eventual exhibición de símbolos de organizaciones ilegales o contrarios a la legalidad vigente», así como ante expresiones «que puedan suponer la exaltación de la violencia o amenazas para personas y colectivos». Las Fuerzas de Seguridad del Estado tratarán de impedir que los participantes de ambas marchas «lleguen a coincidir antes, durante y después».
