WINTERTHUR BARÇA 73
REAL MADRID 68
Basile (5)
Trias (2)
Marconato (10)
Lakovic (5)
Navarro (9)
D.la Fuente (15)
Vázquez (5)
Kakiouzis (14)
Ukic (6)
Grimau (2)
s.c.
Sekulic (2)
Mumbrú (9)
Hervelle (13)
Bullock (4)
Raúl López (7)
Smith (13)
Reyes (16)
Hdez-Sonseca (2)
Tunceri (2)
Tomas (-)
Arbitros: García Ortiz, Conde y Sánchez Montserrat
1er CUARTO 2º CUARTO 3º CUARTO 4º CUARTO
19-15 15-10 21-21 18-22
PALAU BLAUGRANA. 7.200 ESPECTADORES.
Eliminados: No hubo.
BARCELONA.- El otro clásico se pareció más a la final de Copa que al enfrentamiento de Vistalegre: el triunfo cayó otra vez del lado azulgrana. El Barça mantiene su escalada; el Madrid, en cambio, aumenta su caída con su tercera derrota consecutiva en la ACB a manos de un rival que consiguió asfixiarlo en defensa en la primera parte del partido. Los blancos, el equipo más anotador de la Liga, se fueron al descanso con el dudoso honor de convertirse en el equipo que menos puntos ha marcado en el Palau en los dos primeros cuartos esta temporada.
Ivanovic y los suyos lo sabían. Para ganar al Madrid, tenían que hacer un partido perfecto en defensa. Ambos rivales afrontaron el choque con muchas precauciones. Tantas, que la primera canasta no llegó hasta el segundo minuto de juego, de la mano de Mumbrú. Los azulgrana no lograron adelanterse hasta el minuto seis, pero, a partir de allí, se las arreglaron para no dejar ya su ventaja en el luminoso en todo el partido. Y eso que, en la primera mitad, se mostraron excesivamente fallones en el rebote defensivo y negados en el tiro exterior. Un aspecto, este último, compartido por sus rivales. Seis intentos fueron necesarios para que llegara el primer triple, perfectamente respondido por Charles Smith para reducir una primera máxima ventaja de siete puntos.
El segundo cuarto vio la mejoría de los azulgrana en el rebote ante un rival asfixiado por su defensa y al que le costaba un mundo encontrar buenas soluciones de tiro. Los nervios estuvieron a punto de hacerle toda una mala pasada a Mumbrú, quien se jugó la técnica después de que los árbitros dieran por finalizada la posesión de su equipo en una jugada muy protestada por el ex verdinegro. Fue De la Fuente, no obstante, el que inició su particular festival con un triple sobre la bocina que colocaba el 34-25 justo antes del descanso.
El Real Madrid recuperó en parte su mejor versión en el tercer periodo. Peor que en los dos primeros tampoco podía hacerlo. Los blancos lucharon por recortar distancias y, de la mano del acierto de Hervelle y Reyes, se las arreglaron para recortar distancias hasta colocarse, en múltiples ocasiones, a sólo un punto de los azulgrana. Anotaron casi tantos puntos como en los dos primeros cuartos, pero el Barça no se dejó sorprender. Reaccionó al final con triples de Navarro, muy apagado y, otra vez, De la Fuente, para volver a poner tierra de por medio en el marcador del Palau.
Si en Málaga la figura inesperada fue Trias, ayer en el Palau tomó este papel el capitán azulgrana y otros secundarios como Marconato (excelente en la pintura) y Kakiouzis. El Madrid, con defensa en zona y un otra vez entonado Raúl López, bregó lo indecible para colocar de nuevo la emoción en el marcador y darle al partido el auténtico sabor de un clásico. El conjunto de Joan Plaza volvió a acercarse, a recortar distancias y, de hecho, se llevó la victoria parcial. Logró ponerse a un triple del empate en acertadas acciones de Raúl López y Hervelle, pero era demasiado tarde.
Tenía que ser la tarde de De la Fuente. Cuando el acoso rival se tornaba más peligroso, allí estuvo su acertada muñeca desde la línea de 6,25 para maquillar la estadística del equipo. El Barça se llevó el triunfo, pero los madridistas pueden agarrarse a la mejoría del segundo tiempo. La promesa de que volverán sus no tan viejos laureles.