El sindicato abertzale LAB se manifestó ayer por las calles de Pamplona para reclamar la legitimidad de un proyecto político independentista. Varios miles de personas secundaron la protesta, a cuyo término el secretario general de la central, Rafa Díez Usabiaga, aseveró que la izquierda abertzale «no plantea ningún precio político, sino democracia» para Navarra y el País Vasco y «respeto a todos los proyectos políticos, incluido el independentista».
Usabiaga realizó estas declaraciones tras la manifestación convocada por LAB con el lema Contra las deslocalizaciones, defendamos nuestra industria con la autodeterminación. La marcha, que partió media hora más tarde que la organizada por el Ejecutivo foral, contó con la participación de unas 4.000 personas, según la delegación del Gobierno en Navarra. Entre los asistentes se encontraban miembros de la ilegalizada Batasuna como Pernando Barrena o Ainara Armendáriz.
La protesta discurrió en un ambiente festivo y bajo una intensa vigilancia policial. Sin embargo, no se registraron incidentes y, una hora después de su comienzo, la marcha concluyó en la plaza del Ayuntamiento de la capital navarra.
Durante este tiempo, los manifestantes corearon numerosas consignas, de las cuales la mayoría tuvo un carácter político y no laboral. De hecho, dos de las proclamas más repetidas fueron «Independentzia» y «UPN español». Además, los presentes portaron numerosas banderas de Navarra y Euskadi.
Los únicos momentos de tensión se produjeron después de que la manifestación tuviera que variar ligeramente su recorrido debido a unas obras en una de las calles del trayecto. Este cambio de rumbo hizo que los asistentes alcanzaran a ver la movilización convocada por el Gobierno navarro, si bien un notable cordón policial impidió que nadie se saliera del recorrido y la cosa no pasara a mayores.
Derecho a decidir
Una vez llegados a la plaza del Ayuntamiento, Díez Usabiaga tomó la palabra para reivindicar la legitimidad de «todos los proyectos políticos, incluido el independentista». Aseguró que la izquierda abertzale no plantea «ningún precio político», sino que lo que demanda es «sencillamente, democracia en Navarra y en Euskal Herria» y el respeto al derecho a decidir de la ciudadanía de las dos comunidades autónomas.
«La paz en este país significa democracia y respeto a Euskal Herria y a la voluntad de sus hombres y mujeres», añadió.
Asimismo, Usabiaga aseguró que «hoy UPN, PP y CDN quieren agarrarse como un clavo ardiendo al marco político vigente». En este sentido, consideró que estas formaciones «no quieren preguntar a la sociedad navarra sobre su futuro» porque le tienen miedo «a la palabra» de la sociedad navarra.
Por último, el dirigente del sindicato abertzale denunció que la separación de la comunidad foral de «un marco común en Euskal Herria» fue el «precio político que inflingió la derecha posfranquista a la Transición»; por lo que abogó por «levantar los vetos y las hipotecas que el franquismo puso a la Transición» y «poner en marcha una segunda Transición desde el respeto a la voluntad» de la ciudadanía navarra.
También incidió en que «cuando hay aires de cambios en la política del conjunto de Euskal Herria muchos tienen miedo a palabras como diálogo, negociación o respetar el derecho a decidir del conjunto de los ciudadanos de Euskal Herria».
La manifestación, que arrancó desde la estación de autobuses de la capital navarra y que no siguió el recorrido previsto, pasó por Baja Navarra, Paulino Caballero, Emilio Arrieta, San Ignacio, Cortes de Navarra, Estafeta, Mercaderes, para concluir, en la plaza del Ayuntamiento.