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| Que nadie le diga lo que tiene que hacer a alguien que ya ha decidido cuál debe ser su destino (Proverbio árabe) |
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| Impresiones |
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| Legítimas y justificadas protestas por Irak |
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Cientos de miles de personas se movilizaron ayer en Europa y en EEUU para protestar contra la guerra de Irak. En Madrid, decenas de miles de manifestantes salieron a la calle en un acto apoyado por el PSOE, IU, los sindicatos y numerosos colectivos de la izquierda. Rosa Regàs, directora de la Biblioteca Nacional, leyó un manifiesto contra la guerra en Atocha. El acto se desarrolló correctamente y, salvo los gritos de algunos exaltados contra el PP, nada se puede objetar al ejercicio de un derecho democrático como manifestarse. Excesos verbales propios de un tópico antiamericanismo aparte, muchas de las afirmaciones del manifiesto leído por Rosa Regàs coinciden con la línea editorial que este periódico ha venido manteniendo sobre la guerra de Irak. Estamos de acuerdo con que la intervención en dicho país hace cuatro años fue «injusta, cruel e ilegal». También estamos de acuerdo en que no estaba justificada y que la Administración Bush fabuló sobre la existencia de unas armas de destrucción masiva que nunca han aparecido. Y también coincidimos en que la presencia de las tropas estadounidenses en Irak no ha ayudado a resolver el problema sino que lo ha agudizado. Junto a estos mensajes, los manifestantes pidieron también al Gobierno la retirada de las tropas en Afganistán y criticaron el giro de Zapatero respecto al Sáhara. Ningún ministro ni miembro relevante de la dirección del PSOE asistió al acto, lo que indica la voluntad de distancimiento del Gobierno de esta protesta.
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