«Los gastos reconocidos por este concepto superaron en un 66% el presupuesto inicial», indica el informe. Y añade que no se produjo la previa autorización del Govern que, en este caso, era preceptiva, ya que los gastos de personal superaron en más de un 5% el presupuesto inicial.

Turisme Juvenil de Catalunya recibió en 2003, cuando todavía gobernaba CiU, subvenciones de la Generalitat por importe de 2.016 millones de euros que desde el primer momento tenían un destino invariable: 515 millones tenían que dedicarse a sufragar los gastos financieros generados por los préstamos que le había concedido el Institut Català de Finances (ICF). Los 1.501 millones restantes eran para pagar al personal en nómina que realizaba tareas para la Secretaría General de Juventud.

En enero del año 2003, Turisme Juvenil de Catalunya -que dependía del Departament de Presidència, dirigido por el entonces conseller en cap, Artur Mas- firmó un acuerdo con la citada secretaría, que entregaba 1.501 millones a la empresa pública para que los destinase «íntegramente a la contratación de personal» para ejecutar diversos programas de política juvenil contenidos en dicho acuerdo.

Para realizar estas tareas, Turisme Juvenil realizó 61 nuevos contratos de trabajo en el año 2003 lo que disparó su presupuesto, ya que supuso «un incremento del gasto de 827 millones» de euros, según el informe. «La desviación total entre los gastos presupuestados y liquidados es de 2.525 millones. Esta desviación se produce básicamente en los gastos de personal y en servicios exteriores por 1.787 y 1.846 millones de euros, respectivamente», añade.

El incremento de la plantilla como consecuencia del acuerdo con la Secretaria General de Juventud arrojó como resultado un alza del 103% en el número de empleados de la empresa pública. Según la ley presupuestaria, el incremento de más de un 3,1% de la plantilla sólo puede realizarse después de un informe favorable y obligatorio emitido por el Departament d'Economia. Un trámite que no se efectuó «pese a que el incremento aplicado a su personal fue superior al aprobado en la ley de presupuestos para el año 2003».

La Sindicatura de Comptes concluye que «los derechos liquidados y las obligaciones reconocidas del presupuesto de explotación de Turisme Juvenil de Catalunya del ejercicio 2003 superaron en un 29% y un 23%, respectivamente, el presupuesto inicial de ingresos y gastos. Por tanto, la entidad fiscalizadora invita a la empresa pública a que elabore «sus presupuestos más cuidadosamente».

Además, el informe de la Sindicatura detecta que los albergues que gestiona Turisme Juvenil pertenecen a la Generalitat o a entidades locales. La entidad fiscalizadora se muestra partidaria de que estos albergues se adscriban a la empresa pública para que se pueda elaborar un inventario único de estos bienes.

También determina la Sindicatura que el albergue situado en Empúries está asegurado por un importe inferior su valor neto contable y, por tanto, recomienda que «se actualice su valor cuanto antes mejor».

Por último, la Sindicatura de Comptes aconseja a Turisme Juvenil que «limite la utilización del convenio para casos muy puntuales», tras observar que esta empresa «usa asiduamente la figura del convenio para realizar encargos de la Secretaría General de Juventud, para realizar determinados servicios, como es el caso del convenio con La Caixa para la promoción y contratación del Carnet Jove, convenio con entidades culturales y deportivas para la realización de actividades de tiempo libre, etc.».

La Sindicatura llevará hoy también otros tres informes al Parlament sobre gastos en asistencia hospitalaria, las obras de ampliación de la línea 5 del metro y sobre la Subdirección General de Riesgos y Seguros.