Por si fuera poco, expertos del sector no descartan que otras firmas competidoras como BAT (British American Tobacco) o fondos de capital riesgo puedan mejorar la oferta del grupo británico.

De hecho, la también británica BAT reafirmó ayer su estrategia de crecimiento a través de adquisiciones, pero eludió comentar si tiene interés por hacerse con Altadis.

De momento, el consejo de administración del grupo presidido por Antonio Vázquez comunicó ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que rechaza por unanimidad. En opinión del máximo órgano de dirección de la tabaquera, la oferta de Imperial «no refleja su valor estratégico ni el de sus activos únicos y diversificados, así como tampoco sus perspectivas de crecimiento futuro».

En su comunicado al organismo regulador de los mercados, Altadis indica que tanto el consejo de administración como sus asesores «están estudiando las mejores opciones para la compañía, sus accionistas y sus empleados».

Por otra parte, la previsible batalla por hacerse con el control de Altadis ha creado inquietud entre los trabajadores. Representantes sindicales franceses de la compañía afirmaron ayer sentirse «amenazados» por la repercusión que sobre el empleo tendría una posible oferta de compra. Frédérique Bartlette, representante sindical de la Confederación General del Trabajo (CGT) advirtió ayer de que aguardan con temor que la dirección plantee lo que, a su juicio, ocurre «por regla general», tras una OPA: «despidos».

De otro lado, Christian Bouffier, representante sindical de la Confederación Francesa Democrática del Trabajo (CFDT) en Altadis, aseguró que, si bien el consejo de administración de la multinacional hispanogala ha considerado bajo el precio inicial ofrecido por Imperial Tobacco, existe el temor a que si se materializa la OPA, tenga lugar una «reestructuración» en la que «sean los trabajadores quienes paguen las consecuencias».